El Concello negocia con Vitrasa la reorganización del transporte público y ha cerrado con la empresa, según el concejal de Tráfico, el diseño de las nuevas rutas en el centro. El refuerzo incluye la implantación de tres circulares y la modificación de la C16, que cambiaría su itinerario para incorporar la calle Venezuela. De las que se proyectan crear, una seguiría los principales ejes del centro con un trayecto similar al de la C1 –a través de Colón, Plaza de España y Traviesas–, pero incluiría Beiramar con vistas a la apertura en 2011 del Auditorio-Pazo de Congresos. Otra conectaría la estación de autobuses y O Calvario con Balaídos por Travesía, Gran Vía, Fragoso y Castrelos. Y una tercera potenciará el servicio en Navia, donde existe una fuerte demanda vecinal ante el crecimiento del macropolígono residencial. La ruta cruza también Bouzas y Coia, con parada en Praza de América.
La concejalía tiene que llegar a un acuerdo económico global con Vitrasa sobre toda la reestructuración de las líneas, que afecta tanto al centro como a los barrios periféricos y el rural, pero el responsable de Tráfico, Xulio Calviño, considera que las rutas urbanas ya podrán implantarse "en dos meses". "El objetivo es que en cada calle pase un bus cada tres minutos al combinar las circulares nuevas y las actuales", asegura el concejal, En Navia el refuerzo situaría las frecuencias en siete minutos. La circular tendría salidas cada media hora y funcionaría de lunes a viernes.
Ruta por Beiramar
La denominada Circular Auditorio tendría una frecuencia cada 15 minutos y se proyecta para atender la demanda en los días en los que haya programación cultural en el complejo de Beiramar, con salidas dos horas antes del inicio del acto hasta una después de finalizar. Calviño sostiene, no obstante, que se negocia un servicio regular independientemente de la actividad del Pazo de Congresos. La de Balaídos a Gregorio Espino permite un enlace directo entre la estación de autobuses y Balaídos a través del eje central de la ciudad. "Cubre dos zonas vitales", indica Calviño. Aquí las salidas oscilan entre los 30 y los 60 minutos, según el tramo horario y el día de la semana.
Esta circular requiere de la mejora de los carriles para bus en Gran Vía. El de sentido ascendente entre Travesas y Plaza de España, anulado provisionalmente para hacer más fluido el tráfico por las restricciones en el entorno de Povisa –donde se acometen humanizaciones en distintas calles desde hace más de dos años–, se recuperará "en el plazo de un mes y medio", según estimó Calviño. La reposición coincidirá con el fin de la reforma de Tarragona.
El plan de esta ruta incluye un nuevo carril-bus, en el mismo tramo pero en sentido descendente. La medida suprime el aparcamiento, y no está previsto incrementarlo en el entorno. La alternativa estaría en el parking de Pintor Colmeiro, señala Calviño, quien apunta que, además de mejorar el servicio de Vitrasa, la circular ofrece otras ventajas. "Acabaríamos con la doble fila, reducimos el número de vehículos privados que se desplazan al centro, y descenderá la siniestralidad en la avenida", enumera.
El cambio de la C16, que mantendría gran parte de su recorrido actual pero se acortaría para atravesar Venezuela, incluye también un tramo de carril bus, desde el inicio de la calle hasta el parque infantil. "Sería el primero de la nueva fase que queremos poner en marcha", matiza el concejal.
Rutas en el rural
Las tres circulares nuevas y el cambio en la C16 integrarían la reestructuración de las principales líneas urbanas. La reordenación recoge también mejoras en barrios y parroquias con elevada demanda, mientras que en el rural el Concello opta por realizar conexiones desde puntos concretos donde se constate demanda suficiente. "Hay zonas donde recibimos peticiones, pero no es viable", precisa el edil. Como alternativa, el departamento maneja llegar a un acuerdo con la asociación de taxistas para que haga trayectos a lugares específicos donde se constate la necesidad.
El Concello encargó un estudio de transporte integral para la reorganización. "Hicimos encuestas de movilidad, hubo personal en las paradas, y las líneas están muy estudiadas", apostilla el responsable de Tráfico..
