"Tenemos la condición de personal funcionario y lo van a tener difícil para que nos pasemos a la privada; hemos ganado la plaza en una oposición y si la oferta es integrarnos en la plantilla de una empresa, la respuesta será un no rotundo". Es la reflexión de uno de los empleados de mantenimiento del hospital Xeral, Laureano Rouco, que expresa el sentir de los cuarenta trabajadores de su área, una de las que será externalizada cuando entre en funcionamiento el nuevo hospital.

En total, los sindicatos cifran en cuatrocientos los empleos que se hallan en estos momentos en servicios de próxima privatización y de los que ahora se ocupan trabajadores públicos. La Administración rebaja la cifra, sin embargo a "más de doscientos", según la directora de Recursos Humanos del Sergas, Esperanza Fernández, que garantizó que con la nueva infraestructura no se perderá ningún puesto de trabajo y que los empleos públicos lo seguirán siendo: "Contamos con todos los profesionales del área de Vigo", avanzó a FARO hace un mes.

La opción que plantea el pliego de condiciones administrativas de la concesión del nuevo hospital, que refleja que la empresa tenga que aceptar con los empleados dependientes de la Administración "las opciones voluntarias del personal, de pasar a ser contratado laboralmente por el concesionario e integrarse a todos los efectos en su plantilla", no goza de buena aceptación entre los trabajadores.

"Los servicios que se van a externalizar de lavandería, cocina y mantenimiento, no van a estar dispuestos a trabajar en lo mismo para una empresa privada", asegura el responsable de CC OO, Ángel Cameselle, "lo rechazan". Asimismo, el integrante de la Plataforma en Defensa da Sanidade Pública recuerda que el compromiso "fue reconvertirlos a celadores".

En un principio, la Administración sanitaria aludió a la posibilidad de formar mediante cursos de reciclaje a los empleados para ocupar los nuevos puestos. Actualmente, están pendientes de la redacción de un Plan laboral de gran magnitud. Con la expectativa puesta en él, algunos empleados públicos temieron por su posible movilidad dentro del puesto, a lo que el Sergas ha respondido que "todo empleado público del Chuvi tiene un nombramiento para el área sanitaria de Vigo".

El delegado de CIG Saúde y también miembro de la Plataforma en Defensa da Sanidade Pública, se muestra más preocupado por los interinos que por el personal fijo. "En principio, sabemos que todo el personal fijo sería reclasificado en otras categorías, aunque en el pliego de condiciones sólo se refleja la propuesta de que los trabajadores que quieran se integren en la empresa". De todos modos, prefieren esperar a que avance el detalle y se sepa en qué condiciones se plantearía esa subrogación. "No estamos por ese modelo, pero veremos las circunstancias en cada momento", aseguró.

Los sindicatos mantuvieron una reunión con la gerente del Sergas, Rocío Mosquera y la Jefa de Recursos Humanos, Esperanza Fernández, hace escasas fechas con este cometido, aunque los representantes aseguran que no se ha avanzado más en los detalles del nuevo plan laboral.