Es un vial con la velocidad máxima limitada a 50 kilómetros por hora, pero hay quien no duda en pisar a fondo el acelerador. Los controles con radar móvil realizados por la Policía Local en la transitada avenida de Madrid han detectado casos de automovilistas que llegaron a circular hasta 151 kilómetros por hora en horario diurno. La existencia de este tipo de conductas temerarias y los elevados datos de accidentalidad en la zona han llevado al gobierno local a plantear la instalación de radares fijos en esta avenida: el informe económico sobre el coste de la cabina ya está preparado, por lo que la próxima semana la Concejalía de Tráfico se pondrá en contacto con el responsable de Demarcación de Carreteras en la provincia pontevedresa con el fin de pedir autorización para colocar el aparato ya que la titularidad de esta vía corresponde al Ministerio de Fomento.

El análisis de los accidentes registrados en Vigo durante el pasado febrero constataron un incremento de colisiones en la avenida de Madrid, en Arquitecto Palacios y también en Ramón Nieto. Por este motivo, la Policía Local puso en marcha una campaña de control con radar móvil en estas vías que se realizó entre los días 15 y 24 de marzo.

Y los datos más preocupantes se registraron en la avenida de Madrid. La velocidad media de los conductores infractores superó los 80 kilómetros por hora y, en el apartado de valores máximos, se sobrepasaron con creces los 100: la mayor velocidad constatada en horario de mañana fue de 107 km/h, mientras que por la tarde fue de 151 y por la noche, de 141 km/h. De media, fueron denunciados cuatro de cada cien automovilistas que circulaban por una avenida que tiene una intensidad de tráfico de más de 600 vehículos cada hora - y de hasta 916 por la mañana-. “La campaña no tiene un fin recaudatorio; lo que se busca es que los conductores bajen la velocidad en las zonas donde se demuestra que hay más siniestros”, afirman fuentes policiales.

La instalación de radares fijos en la avenida de Madrid es, según estas mismas fuentes, la mejor de las soluciones. “Es la mejor manera de que la gente sea prudente; y la prueba está en que donde hay cabinas instaladas, se respetan las velocidades”, añaden, poniendo como ejemplo el caso del túnel de Beiramar.

Comparativa con 2009

En la avenida de Madrid no hubo controles con radares móviles en 2009, pero sí en Arquitecto Palacios y en Ramón Nieto, las vías que también fueron objeto de la campaña policial de este pasado marzo. Y en estas dos zonas el número de denuncias y de velocidades máximas no alcanzan los registros de la avenida de Madrid y han bajado con respecto al pasado año. En Arquitecto Palacios, donde no se puede sobrepasar los 70 km/h, sólo fueron denunciados el 0,86% de los pilotos. La velocidad media de los infractores fue de 86 km/h y la máxima alcanzada, de 108. En Ramón Nieto, con un límite de 50 km/h, los conductores sancionados iban a una media de 79 km/h. El registro máximo fue de 96 km/h y apenas fueron sancionados dos de cada mil automovilistas.