Los agentes del Equipo de Vigilancia y Apoyo Policial (EVAP) de la Policía Local reciben cada año una media de 130 nuevas órdenes de alejamiento, la mayoría sobre víctimas de la violencia de género.
En total, esta unidad tuvo que controlar 304 órdenes durante el último ejercicio, ligeramente por debajo de las activas en 2008, cuando se contabilizaron 308. Si bien, esta tarea de vigilancia y protección la compatibilizan con el Cuerpo Nacional de Policía y la Policía Autonómica.
Durante el último año se cancelaron 45 órdenes de protección por sobreseimiento o archivo de la causa y 82 por vencimiento de la medida cautelar o de la sentencia. Según el último balance de la Policía Local, una de cada diez víctimas renuncian a esta protección por aceptación expresa al reanudar la convivencia o la relación afectiva.
Respecto a las edades de las víctimas, más del 50 por ciento de cuya vigilancia se encarga la Policía Local están entre los 20 y los 39 años. En la mayoría de los casos se trata de matrimonios o parejas.
Agresores
En cuanto al perfil de los agresores, la mayoría tiene también entre 20 y 39 años. Si bien, durante 2009 se produjo una caída en la franja de edad de menores, en los que no se detectó ningún caso, cuando en 2008 había un 21 por ciento de los casos de jóvenes menores de 19 años.
La nacionalidad española es la predominante entre los agresores, al suponer un 82 por ciento de los casos. Le sigue la portuguesa, con un 5,06%.
Los agentes del Equipo de Vigilancia y Apoyo Policial tuvieron que intervenir durante 2009 en 21 quebrantamientos de condena, de las cuales practicaron cinco detenciones.
