La reforma de parte del inmueble de la calle Cánovas del Castillo conocida como "Casa de América" para destinarla a Oficina de Extranjería deberá esperar a tiempos mejores porque en aplicación del Plan de Austeridad, el Gobierno central ha decidido paralizar el proyecto.

La suspensión se justifica desde el Ministerio de Presidencia por la necesidad de destinar todos los fondos disponibles para salvar proyectos estratégicos como el AVE o las autovías. Se mantiene, en cambio, el acondicionamiento del antiguo Banco de España en Pontevedra, con el mismo fin y para dar servicio a la capital y el norte de la provincia, "porque la actuación está ya comprometida".

Esta paralización de la Oficina de Extranjería en Vigo se suma a la anunciada hace unas semanas y que afecta a la construcción de la nueva sede de la Tesorería de la Seguridad Social, en el solar de La Metalúrgica.

Desde la Subdelegación del Gobierno en la provincia se insiste en que se trata de una "suspensión" y no una anulación "pues el proyecto estaba ya aprobado, con el presupuesto cerrado y contaba con todos los permisos municipales. Las obras tendrían que haber comenzado a finales del año pasado, pero hubo algunos trámites que la retrasaron".

500.000 euros

En su momento se justificó la necesidad de dotar a Vigo de una Oficina de Extranjeros que diera servicio también a todo el sur de la provincia para tramitar los permisos de trabajo y residencia del 60% de los extranjeros residentes en la provincia con tarjeta en vigor, unos 30.000, de los que algo más de la mitad son comunitarios.

La reforma, presupuestada en cerca de 500.000 euros, afectaba a la segunda planta de la "Casa de América", con entrada directa por Teófilo Llorente, con una superficie total de casi 500 metros cuadrados ocupados en la actualidad por la dirección provincial de Trabajo y se había alcanzado un acuerdo para utilizar también una pequeña parte de las instalaciones de la Inspección de Trabajo. Se trata de una parte del inmueble situada bajo la azotea que enlaza con A Pedra y donde apoya la pasarela de A Laxe. El plazo de ejecución se había calculado inicialmente en seis meses.

Para el acondicionamiento de esa Oficina, fue necesario recuperar la cesión de la "Casa de América", hecha en su momento a la Xunta de Galicia y un acuerdo con la Inspección de Trabajo para que cediera también parte de sus instalaciones.

Este edificio, con entrada principal por Cánovas del Castillo, es calificado en el Plan Especial del Casco vello como de interés urbanístico muy alto, con nivel de protección ambiental siendo elementos a proteger, entre otros, las fachadas de piedra.