El Consello de Goberno de la Universidad de Vigo aprobó ayer la convocatoria de quince plazas de profesores con las que se pretende estabilizar a jóvenes investigadores del programa autonómico Parga Pondal y del Ramón y Cajal, de ámbito nacional.
Hace una semana, los Parga Pondal de Vigo y Coruña denunciaron que se encuentran en una situación "dramática" y criticaron que las universidades aleguen "excusas económicas" para no contratarlos al terminar la subvención autonómica.
En los dos últimos años, cinco investigadores abandonaron sus laboratorios de la Universidad de Vigo al no recibir ninguna oferta laboral una vez consumidos los cinco años financiados por la Xunta y a pesar de que la filosofía del programa es que las instituciones les busquen acomodo.
Los Parga Pondal aseguran que los programas propios de promoción no son suficientes para garantizar su estabilidad laboral. Desde 2005, la institución viguesa contrató a través de ellos a sesenta investigadores, según detalló ayer el rector Alberto Gago: 46 Ramón y Cajal y Parga Pondal, ocho ayudantes, cinco asociados y un visitante.
Durante el debate previo a la aprobación de las plazas, los profesores Luis Marzán y Luis Muñoz criticaron que la normativa limita el crecimiento de áreas con gran actividad investigadora y pusieron en duda el papel de la investigación en la Universidad de Vigo.
Francisco Javier Rodríguez Berrocal, del grupo opositor Nova Universidade, señaló que el problema de fondo es la inexistencia de una carrera investigadora como tal, una figura que no existe en el sistema gallego. Gago señaló su intención de "mejorar" el programa de promoción y señaló que debe ser "una prioridad".
En el Consello de ayer, también se presentaron los temarios, pruebas y baremos de las convocatoria de 48 plazas de personal funcionario de administración y servicios.
