La mitad de las inversiones que figuran en el último presupuesto del bipartito para Galicia, en referencia a Vigo, están sin ejecutar. Un presupuesto que se gestó el pasado otoño y que estaba concebido para la pervivencia, tras las elecciones de marzo, del gobierno de coalición entre socialistas y nacionalistas. Por ese motivo, entre otros, las principales partidas para la ciudad están sin gastar.

Con el cambio de gobierno en Santiago y la llegada de la nueva Xunta, varios proyectos fueron rechazados, con lo que el dinero consignado por el bipartito se ha mantenido este año sin ejecutar obra en los principales proyectos. Al menos 28,2 millones de euros permanecen en las arcas autonómicas, pese a que estaban asignados a proyectos concretos que ni siquiera han llegado a iniciarse.

La principal partida sin gastar y que figuraba en el presupuesto para 2009 es la correspondiente al nuevo hospital, con una cuantía de 11,5 millones de euros. Un centro hospitalario en el que se está ahora mismo en el proceso de expropiación de los terrenos, con lo que la consignación presupuestaria realizada era irrealizable en este año.

Le sigue en cuantía la cantidad que el bipartito pretendía gastar este año en la humanización y carril bici de la carretera entre Vigo y A Ramallosa. Un total de 7,3 millones, que tampoco se gastarán. Sí hay una importante consignación para el próximo año, en un proyecto parecido pero sin el carril bici.

Los cinco millones de euros consignados para la depuradora del Lagares, que generaron uno de los primeros conflictos cuando llegó la nueva Xunta tampoco se han invertido, porque todavía no está firmado el convenio con el Ministerio de Medio Ambiente para la realización de la obra.

Los estudios para el desarrollo del Plan Íntegra –744.000 euros– tampoco se llegaron a gastar. La nueva Xunta decidió dejar de lado ese programa de carreteras y realizar uno nuevo, conocido como Plan Move.

Y la ampliación del túnel de Beiramar, para el que sólo quedó un anteproyecto tras las elecciones de marzo, se habían consignado 1,5 millones de euros de los cuales tampoco se ha gastado dinero alguno. Lo mismo ocurrió con los 200.000 euros que se habían presupuestado para arreglos en los edificios judiciales vigueses y que se integran en el próximo ejercicio.

Tampoco se llegó a invertir la cantidad de 308.000 euros que se destinaba a estudios para el enlace entre el campuis de la Universidad y la autopista.

La Consellería de Pesca, por contra sí gastó dos millones de euros en el pago correspondiente a Zona Franca en contraprestación de los terrenos para la Ciudad del Mar, en las fincas que ocupaba la antigua ETEA y que son propiedad del Consorcio, según el convenio firmado por el anterior bipartito.