Vigo no está preparada para un chaparrón como el del pasado lunes. Los responsables de Aqualia asumen que las lluvias torrenciales fueron "excepcionales" y admiten que la red de saneamiento no está preparada para aliviar los casi 90 litros por metro cuadrado que cayeron en un solo día. "Estas lluvias no entran dentro de los parámetros normales. En pocas horas llovió en Vigo tanta agua como en todo el mes de octubre del año pasado. Por este motivo se produjeron los problemas en la red de saneamiento. Se trata de un hecho aislado y esporádico. El saneamiento de una ciudad no se planifica en función de una situación excepcional como ésta", argumentan.

Los responsables de la empresa concesionaria del saneamiento público insisten en que la cantidad de agua caída el lunes pasado -cuando se registraron los principales problemas- fue desmesurada. Admiten que la empresa estaba "preparada" y que actuaron en colaboración con el Concello con todos los equipos de emergencia. "Las dimensiones que tendría que tener la red de saneamiento para poder absorber la cantidad de agua caída tendrían que ser aproximadamente como los túneles del metro", ejemplifican.

Pese a que desde Aqualia asumen que las inundaciones del lunes fueron un mal menor, proponen mejoras para reducir sus efectos. "Una forma de disminuirlos sería con la construcción de una red separativa partiendo de la actual. De esta forma, los caudales a transportar serían menores y se podría tratar de forma independiente cada zona", explican.

Las 38 alcantarillas que saltaron a lo largo de todo el día fue la garantía que evitó más de una catástrofe. "Son como los ´fusibles´ de la red de saneamiento, ya que contribuyen a liberar la presión acumulada. Si las tapas no saltaran, se podrían producir peores consecuencias, como el levantamiento del pavimento o la formación de socavones en la calle", aseguran los técnicos.

Zonas habituales

Las lluvias torrenciales de los tres últimos días cogieron por sorpresa a los responsables municipales –el edil de Seguridad, Xulio Calviño, asegura que no fueron alertados por Protección Civil– pero no así a los vecinos de zonas como Balaídos, Colón, Julián Estévez o Coruña, que un año más tuvieron que soportar las graves inundaciones y riadas que padecen desde hace décadas cada vez que llueve con intensidad.

La calle Olímpicos, que rodea una de las gradas del estadio de Balaídos, así como sus aledañas, volvieron a ser uno de los puntos negros del chaparrón. La imagen de vehículos anegados no es nueva. La proximidad del río Lagares y la ubicación de las infraestructuras deportivas por debajo de la cota del río provocaron estas inundaciones por enésima vez.

Las bolsas de agua se repitieron por decenas de rincones de la ciudad. La presencia de colectores de agua en las inmediaciones de Colón, Julián Estévez o Beiramar volvieron a jugar una mala pasada a los vecinos. La coincidencia de las lluvias torrenciales con la pleamar fue la causa de las principales inundaciones ante la imposibilidad de evacuar todo el agua caída. En zonas más alejadas del centro, como en Castrelos o Balaídos, fue la subida del cauce del Lagares o los lodos provenientes de las obras de humanización las causantes de los problemas registrados en los tres últimos días.

El PP acusa al gobierno local de "falta de previsión"

"Falta de previsión". El portavoz del grupo municipal del PP, José Manuel Figueroa, se refirió a la fuerte lluvia que cayó el lunes en la ciudad y a las numerosas inundaciones que resultaron de la tromba de agua. Figueroa reafirmó que anteayer fue uno de esos días caóticos para Vigo, en los que el caos estuvo instalado durante muchas horas y en el que se domostró una gran ausencia "de dirección política".

El Partido Popular denuncia que, ante la previsión de importantes lluvias para el fin de semana y los primeros días de la semana, se produjeron faltas importantes, como la actuación de agentes de la Policía Local en las calles más afectadas. También indica que hubo una falta de señalización en las zonas peligrosas para evitar caidas y deslizamientos y de alternativas al tráfico. Sobre todo, se refieren a una "falta de planificación" en las obras de humanización.

"Nosotros ya denunciamos que el Plan E era un fracaso por el caos de tráfico, la suciedad y el malestar en todo el entorno", criticó ayer Figueroa. Ellos, como griupo municipal, piden disculpas a los ciudadanos afectados, pero exigen al alcalde de Vigo, Abel Caballero, que pida disculpas a los afectados por las riadas por "haberles dicho que se gestionó correctamente todo el día de ayer (por el lunes)".

Colector de Colón

También aprovecharó Figueroa su comparecencia pública para recordar que el colector de la calle Colón fue "negado" por Abel Caballero cuando era presidente de la Autoridad Portuaria. "Aún no ha movido, desde entonces, ni un sólo papel para ponerlo en marcha", a pesar de que el propio Partido Popular presentó en noviembre de 2008 una moción para que el alcalde hiciese las gestiones necesarias para poder sacarlo adelante.

"Los bomberos colapsados y sin la Policía Local. Fue un día para olvidar", resumen una jornada que desbordó en todos los sentidos.