Cumple un año al frente del Centro Tecnológico de Eficiencia y Sostenibilidad Energética. Energylab, con sede en la Universidad de Vigo, sortea la crisis con un buen sabor de boca por el trabajo y los resultados obtenidos y han puesto en marcha ocho nuevos proyectos.

-Además del balance técnico de este primer año de trabajo, ¿cómo lo analiza en términos de satisfacción?

-Es un éxito. En este momento somos doce personas, con ambición de ampliar plantilla en pocos meses y tenemos en marcha diversos programas en líneas tecnológicas.

-¿Se lo esperaba?

-Pues la verdad es que cuando desarrollábamos hace dos años el plan de viabilidad no podíamos prever que la situación económica llegaría al punto actual y, aún así, los patronos y las compañías siguen apostando por nosotros a pesar de la crisis.

-¿Y el futuro inmediato?

-No tenemos problemas para continuar trabajando. Las empresas apuestan cada vez más por la eficiencia energética, debido a lo que supone a nivel de coste económico y medioambiental, y tienen buenas expectativas hacia nosotros.

-Ustedes abogan por la reducción del consumo energético en las empresas, antes que por la implantación de energías renovables. ¿Cómo se puede llevar a cabo ese ahorro?

-Mediante las inversiones I+D. Las tecnologías se amortizan y se mejora en términos de funcionalidad y de rendimiento.

-Si se disminuye mucho la cantidad de energía utilizada, se acaba yendo contra los principios de la termodinámica. ¿Dónde está el límite?

-No se trata de llegar a un consumo cero, pero sí se puede, con la mejora de los materiales y los diseños, ir arañando kilovatios. Un motor se puede aplicar a varios procesos o hacer que realice la misma función con menos energía.

-¿De qué manera?

- Optimizando los diseños y añadiendo componentes que mejoren la eficiencia energética. Por ejemplo, con las bombas de calor geotérmicas se pueden aprovechar las características propias de la corteza terrestre, haciendo que trabaje contra el subsuelo y no contra la atmósfera. Así se supera en un 40% el rendimiento dealgunos sistemas convencionales.

-¿La incorporación de los grupos de trabajo de las tres universidades gallegas es ya una realidad?

-Las tres universidades son patronas del centro e intervienen en los consejos y asambleas, como parte de su gestión y dirección. A nivel del trabajo de investigación, conseguimos que poco a poco se vayan sumando. Hay una persona de la Universidad de Vigo que trabaja directamente en todos nuestros proyectos ya desde el primer día. Queremos trabajar duramente para que colaboren con nosotros más equipos.

-¿Cuál es su metodología?

-Buscamos identificar, desarrollar, promover y difundir tecnologías, procesos, productos y hábitos de consumo que permitan la mejora de la eficiencia y sostenibilidad energética en la industria, la construcción, el transporte y en la sociedad en general.