Un tres por ciento más que el curso pasado. Los estudiantes de primer curso matriculados por primera vez en las titulaciones sin límite de plazas de la Universidad de Vigo ascienden, a día de ayer, a 2559. La cifra fue confirmada por el rector, Alberto Gago, en su informe al Consello de Goberno.

La matrícula registrada en los cursos de posgrado se eleva a 1318, mientras que el número de preinscritos en el curso para el profesorado de educación secundaria obligatoria, bachillerato, formación profesional y enseñanza de idiomas, el antiguo CAP, es de 550.

Gago informó que un 98% de estas personas optó por matricularse a través de internet, mientras que en el caso de los grados, los matriculados por primera vez en primero en titulaciones sin límite de plazas de la Universidad optaron en un 60% de los casos por la inscripción en línea.

El proceso de matriculación se mantiene abierto hasta finales de octubre.

Desestimación

Ayer se aprobó también por asentimiento rechazar los recursos presentados polos profesores Humberto Michinel, Claudio Cerdeiriña, Diego González e Daniele Tomasini, contra acuerdos adoptados por la Xunta de Centro de la Facultad de Ciencias de Ourense en relación con la transformación de la licenciatura de Física.

En el debate que precedió al rechazo de los recursos, la secretaria general, Esther González Pillado, y el rector confirmaron, a preguntas de los profesores, la capacidad de la Xunta de Centro, tras el acuerdo adoptado en su día por el Consello de Goberno, para actuar como Xunta de Titulación encargada de elaborar, aprobar y modificar para cada titulación las propuestas de planes de estudio. Frente a la postura del profesor Cerdeiriña, que defendió "la existencia de incorrecciones formales en el proceso" y lamentó la escasa antelación en la convocatoria de la junta extraordinaria en la que se aprobó por mayoría la transformación de Física en un grado en Ciencias Ambientales, Gago aseguró que es lógico que haya dudas en un proceso de estas características, pero "no problemas formales".

Por su parte, Esther González explicó que la alegación referida a la improcedencia de la convocatoria de la sesión por no cumplir ésta, por 25 minutos, el mínimo de 24 horas de antelación, no implica "merma" de las facultades que tienen los recurrentes.