“La defensa de la vida es hoy absolutamente necesaria porque de manera no clara pero sí contundente se están produciendo ataques contra la vida de seres indefensos”. Con este convencimiento acudió ayer a Vigo invitada por la Delegación Diocesana de Pastoral Familiar la doctora en Derecho María del Carmen Fernández de la Cigoña, a quien sorprende que sea “precisamente un gobierno que defiende la igualdad y la paridad el que atente contra la vida de esta manera”. Defiende así más ayudas a las embarazadas para reducir la tasa de abortos.

La también profesora de Historia del Pensamiento Político Español y Doctrina Social de la Iglesia añade que la reforma de la ley del aborto no es el “único ataque reciente, sino uno más junto con la política seguida con las técnicas de reproducción asistida o la manipulación de embriones”. Defiende que hay vida “desde el momento de la fecundación y la ciencia así lo demuestra” e insiste en que la defensa de la vida “compete a todos, no es una cuestión ideológica ni exclusiva de la Iglesia, aunque se pretenda dar esa imagen interesada”.

Muy al contrario, recalca en que hay muchas personas “con fe o sin fe que entienden que la vida debe ser protegida” . Entiende que “interesa vincular exclusivamente con la Iglesia el movimiento en contra del aborto” pero que afecta a todos porque “es un fracaso de toda la sociedad”.

De la polémica reforma de la ley lo que más le preocupa es que dé lugar a que alguien pueda decidir sobre la vida de un ser humano pero también la “aberración jurídica” que supone el permitir que menores de 16 años no necesiten autorización de sus padres. “Esta propuesta no es sostenible desde el punto de vista jurídico y obligaría a modificar toda la legislación actual”, concluye.