El Puerto lanzó ayer sus principales proyectos: la reforma de la fachada marítima central: las ampliaciones en Areal, O Berbés y Chapelisa; y la construcción de más rampas en Bouzas. Todos ellos están recogidos en el Plan de Usos, que el presidente de la institución, Jesús Paz, presentó al consejo de administración. El relleno de Areal, que ganará al mar 77.000 m2; y la actuación en Bouzas, no esperarán. Ya se ha iniciado la fase de trámite y diseño de soluciones técnicas.

Las demás intervenciones son propuestas, ya que el documento no ha sido aprobado. Paz asegura que se han atendido el 80% de las alegaciones, y desaparecen las ampliaciones “injustificadas”. La mayor es la de Duchess, en Rande, una zona que se plantea ahora como espacio de ocio con mirador en el cargadero de mineral, mientras que la de Chapelisa, que se mantiene, es calificada por el ente de “vital para las industrias frigoríficas”.

La comunidad portuaria ha consensuado el Plan de Usos, que inicia ahora su andadura. “No es una patata caliente. Lo tramitará la nueva administración”, apuntó Paz, que será relevado al pasar a gobernar el PP la Xunta. “Es razonable, equilibrado y respetuoso con la Ría. Todas las actuaciones se someterán a estudio ambiental”, matizó. El Puerto desafecta 11 kilómetros de costa, sobre todo en Redondela, Vilaboa, Moaña y Cangas. Las bateas, junto a los puertos deportivos situados fuera de la ciudad, dependerán así de otras administraciones. “Prescindimos de zonas innecesarias y cumplimos una demanda histórica de los mejilloneros”, añadió.

La transformación de la fachada central, tras la revisión del Plan Nouvel, conserva la torre de 116 metros y 27 plantas, con un mirador y restaurante panorámico, aunque el uso pasa a ser portuario “No es lógico un hotel en un muelle”, justificó sobre el cambio Paz. Además se duplica la longitud de la terminal de cruceros hasta los mil metros; y se incluye allí el paseo llamado ““Jardín de las Mareas”, un balneario y la estación de ría; mientras que el puerto deportivo gana 400 plazas. tal y como adelantó FARO. “Los criterios esenciales se mantienen”, agregó Paz.

Una de las novedades que presentará la terminal de cruceros es que desaparecerá la verja que separa la zona pública de la portuaria. El proyecto la sustituye por una lámina de agua. “La torre será un hito”, destacó el presidente de la institución.

El crecimiento de la actividad portuaria recoge intervenciones desde Bouzas a Chapelisa. El anterior relleno diseñado en Bouzas desaparece al ganarse 70.000 m2 en los silos en altura ya adjudicados. No obstante se construirán dos rampas, cada una de 300 metros, además de mejorarse la última fase construida para permitir en el futuro una estación de transporte intermodal. El coste de las rampas es de 24 millones y el Puerto ha iniciado el trámite ambiental. Sobre la escollera se creará un paseo. “Buscamos atraque y calado”, sostuvo Paz.

Las concesiones de Beiramar dejarán de tener uso portuario en el futuro, pero, para liberar la zona, ocupada por industrias frigoríficas, el Puerto exige una alternativa. Paz garantiza que no se cerrará “ni una sola empresa”. El futuro polígono de Valladares, Mos y el Puerto Seco son las principales opciones.

El organismo apoya la prolongación del túnel de Beiramar, aunque ha propuesto mejoras para evitar que se vea afectado el tráfico portuario. En O Berbés la escollera se convierte en muelle, con lo que avanza hacia el mar 40 metros y abre una línea de atraque de 750. El relleno de Areal alarga y ensancha el Muelle Transversal, además de adelantar el de Comercio. “Ya hemos encargado la asistencia técnica para definir el sistema constructivo”, detalló Paz. La obra puede costar entre 30 y 60 millones. “Es urgente porque hay fondos europeos este año”, añadió. La piedra, la madera y el aluminio se concentrarán allí para especializar Guixar en contenedores.

En Punta Chapelisa se prioriza el congelado con el relleno. “Es necesario evitar el riesgo de deslocalización de industrias”, apostilló Paz. En el cargadero de mineral de Rande se proyecta un mirador y una zona de ocio.