"Agradezco a los que han exagerado mis méritos para estar aquí; pero no soy proclive a homenajes, porque aunque no lo crean soy tímido[...] y también les agradezco a ustedes que quieran escucharme, ¡ya tienen mérito!". Así se hizo paso el primer aplauso.

La ironía no abandona al político promotor de la Ley que reguló las atribuciones de los Ingenieros Técnicos Industriales. Por eso, Alfonso Guerra, fue reconocido ayer por ese Colegio profesional de Vigo, que cumple 50 años y quiso entregarle la insignia de oro. Lo hizo la presidenta del Parlamento, Dolores Villarino, no sin dificultad para clavarla en su solapa. Y Guerra se reconoció entre ellos, recordando su "única profesión", porque la otra, dijo, "es una actividad, larga, pero sólo una actividad" [por la política]. Compartió galardón con el director de la Escuela Técnica de la Universidad de Valencia, Enrique Ballester, padrino de la investidura del astronauta Pedro Duque.

Pero el ex vicepresidente del Gobierno (ahora preside la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados),no pasó de puntillas. En una visita al alcalde de Vigo, Abel Caballero, que él conoció dirigiendo un Ministerio; respondió sin tapujos sobre la inhibición del juez Garzón en la causa que él mismo abrió sobre los desaparecidos en la Guerra Civil y el franquismo: Defendió el derecho de las familias con parientes "en las cunetas, en los campos" o en fosas comunes tienen para recuperar sus cuerpos y enterrarlos. "Ahora, pasar de ahí a hacer unas operaciones de tipo propagandista, como es decir: yo lo voy a hacer un día todo y a los cuatro días, yo no puedo hacerlo...hay que ser un poco más riguroso", apuntó. Los jueces "no pueden ir por libre"; están sometidos "como cualquier ciudadano" a las leyes. Ycitó las de amnistía y la memoria histórica.

Pero no sólo arremetió contra Garzón, si no que recordó a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, (que había dicho que en la sede del PSOE hay retratos de protagonistas de la Guerra Civil y de la República y que en la del PP no ve cuadros de la dictadura). Los "retratos" de la dictadura puede verlos presidiendo mesas de su propio partido, el PP, dijo a Aguirre "Pero, ¿qué me dice?, ¿para qué quieren los retratos?", bromeó.

Minutos antes, a su llegada al centro social Caixanova, vaticinó que el PSOE ganará las elecciones autonómicas en Galicia, pero que la reforma del voto emigrante (y la petición de que sea en urna), no llegará a tiempo: "Es muy difícil que tiempo, desde el punto de vista jurídico". "¿Y la placa de sor Maravillas?", pregunto. "La propuesta fue un disparate, la decisión adoptada ahora es la correcta", aseguró tajante.

Y en su discurso oficial, mucho más humano, recalcó que "la amistad es la ciencia de los hombres libres", parafraseando a Camus,"por eso falta amistad entre los hombres de pensamiento diferente". Y cerró, el último y largo aplauso.