El tráfico en Rande echa el freno. Por primera vez, el número de vehículos que cruzan la Ría de Vigo por el emblemático viaducto baja en los meses de mayor afluencia de visitantes al sur de las Rías Baixas. Entre julio y agosto pasados, el tramo Rande-Teis de la AP9 -el que mide la densidad circulatoria por el puente- perdió en total de 120.000 vehículos. De los 76.687 y 77.297 turismos que lo atravesaron a diario en esos mismos meses de 2007, se pasó a 75.250 y 74.430, respectivamente. La crisis económica parece estar detrás de este inédito balance para una infraestructura viaria "técnicamente", según los expertos, colapsada.
La caída de la densidad de tráfico en el puente de Rande durante la temporada veraniega queda patente. En agosto fueron 3.000 vehículos menos que el año pasado; y en julio más de un millar. Marzo fue el tercer mes que perdió tráfico en relación al ejercicio pasado. De los 64.181 turismos de 2007, se pasó a 61.700.
Ésta es la primera vez desde que se suprimió el peaje entre Vigo y O Morrazo -en mayo de 2006-que la densidad de tráfico en Rande sigue prácticamente igual de un año a otro
Frontera de los 60.000
Aunque la cantidad de vehículos que cruzan Rande cada día no ha subido este año, sí que ha conseguido batir un récord y superar una nueva barrera. Por primera vez, la densidad media de turismos que atraviesa a diario el viaducto no baja de los 60.000. Enero, el mes con menor demanda, alcanzó este año 60.775 vehículos, frente a los 58.661 que se contabilizaron el año pasado.
Las cifras registradas hasta agosto de 2008 dan un respiro al puente de Rande, pero continúa en el umbral del colapso. El boom se produjo con la eliminación del peaje. El tráfico se disparó entonces en 7.500 vehículos diarios. Desde la supresión la densidad de turismos creció un 10 por ciento.
Balance mensual
La media de vehículos que soporta cada mes el viaducto es de dos millones. En lo que va de año lo han empleado ya 16.147.650 usuarios. A finales de este ejercicio se habrán superado con creces los 20 millones de turismos.
Y mientras Rande amenaza con colapsarse de una vez por todas, la ampliación de dos carriles prevista por la Xunta de Galicia continúa bloqueada. El presidente gallego, Emilio Pérez Touriño, lo reconoció a finales del mes de octubre. La negociación entre el Ministerio de Fomento y Audasa -empresa concesionaria de la autopista- pasa por "dificultades", admitió. El obstáculo que impide dar vía libre a la reforma del puente es el reparto de los 400 millones en los que se presupuesta la obra.
La Conselleira de Política Territorial, María José Caride, y el propio Touriño anunciaron en septiembre del año pasado que las obras comenzarían a principios de 2009. La falta de acuerdo entre Audasa y Gobierno Central podría ahora demorar las fechas y afectar a los planes previstos. "Sigue siendo un proyecto necesario que no debe quedar paralizado", garantizó Touriño.
