Una treintena de vecinos de la parroquia viguesa de Coruxo, afectados por el mal funcionamiento de la depuradora instalada en la zona, se concentró hoy ante las instalaciones y cortó el tráfico durante un cuarto de hora para reiterar su rechazo a la nueva macroestructura proyectada en el recinto. Según explicó, en declaraciones a los medios, el portavoz del colectivo, José Antonio Fernández, la movilización de hoy tiene "un significado especial" ante la cercanía del 11 de noviembre, fecha en la que varios vecinos acudirán a declarar ante el juez, con motivo de recurso presentado en contra de la macrodepuradora proyectada.

Fernández consideró que la nueva estructura "incrementará los problemas de los vecinos de la zona", quienes se quejan de los "olores" y de los "gases" que desprende la actual. Según explicó, el nuevo proyecto incluye "alturas hasta los 20 metros" para una Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) que "quedará pegada a tres colegios donde estudian 1.300 alumnos de la ciudad de Vigo".

Además, el representante de los afectados consideró que la ubicación elegida responde al hecho de que se trata de "un barrio de trabajadores" y añadió que si en él residiese "gente de alta alcurnia, no se les ocurriría". Así, algunos empleados de empresas de la zona también acudieron hoy a la movilización, aunque los organizadores esperaban que la respuesta hubiese sido mayor.

Denuncia

En cuanto a la denuncia presentada por las supuestas "listas negras" de acceso al Pleno de la Corporación Municipal de Vigo, Fernández aseguró que por ahora no se les ha comunicado nada al respecto, aunque aseguró que los afectados seguirán acudiendo a presenciar las sesiones y afirmó que "es una lucha de David contra Goliat".

Finalmente, recordó que el colectivo ha interpuesto tres recursos que siguen su tramitación, uno de ellos contra la actual EDAR, otra contra la macrodepuradora --por el que los vecinos acudirán a declarar el día 11-- y otra contra la ubicación de una zona industrial cercana a la estructura. José Antonio Fernández aseguró que la nueva macroestructura "es ilegal" porque "no cumple el reglamento de actividades molestas e insalubres" como, a su juicio, queda demostrado con la experiencia de los vecinos con la actual estructura, cuyas deficiencias han llevado a los vecinos a expresar sus quejas en múltiples ocasiones.

Asimismo, consideró que con el nuevo proyecto "se ha perdido la oportunidad de hacer una depuradora en clave metropolitana" que solucione de manera "definitiva" el problema de saneamiento y cuente con un emisario que vierta fuera de la Ría de Vigo.