Ante la falta de compradores, la vía del alquiler. Promotores con obra en Vigo han empezado a arrendar los pisos terminados que no han logrado colocar en el mercado tras el fuerte descenso de las ventas. La asociación que representa al sector, Aproin, tiene ya constancia de al menos dos empresas que han acudido a esta fórmula para obtener financiación de los pisos y hacer frente a sus compromisos bancarios, mientras que una tercera ha apostado por esta fórmula de negocio y construye un edificio entero destinado a arrendamiento. "Buscan ideas imaginativas ante la situación actual", explica el presidente de la entidad, Javier Garrido. La alternativa, reciente en Vigo y ya extendida en otras ciudades españolas con mayor "stock" de viviendas, está en vías de expansión.

La oferta de alquiler incluye, en algunos casos, la opción de compra, que permite al inquilino adquirir el piso transcurridos cinco años y amortizar así una parte del coste. Las empresas que se han apuntado a esta variante buscan impulsar el mercado en tiempos de crisis y garantizar al mismo tiempo el valor del inmueble, ya que el alquiler provoca un deterioro a medio plazo y, por tanto, lo deprecia para su venta futura. En Vigo los pisos nuevos han subido un 7%, en contra de la tendencia en el resto de España, donde baja el precio. Sin embargo la vivienda usada ya se abarata en la ciudad, según datos del ministerio, y un piso medio cuesta 7.000 euros menos que en septiembre de 2007.

Poca actividad

La elección de alquilar pisos destinados en principio a la venta, ya sea con o sin opción de compra, es novedosa en Vigo, debido a que el número de viviendas sin comprador es relativamente bajo en comparación con otras urbes. La asociación ha hecho una encuesta interna que cifra en 500 el "stock" en el pasado mes de junio, a los que se unirían otros 620 por construir que no están vendidos. Los datos del Observatorio Inmobiliario de la Fundación Caixa Galicia, por contra, colocan el número de inmuebles ya acabados y sin comprador en 11.053, de los que alrededor de dos mil, según expertos consultados, podrían estar en Vigo.

La asociación de promotores opina que la fórmula del arrendamiento tenderá a crecer en los próximos meses ante las dificultades de algunos empresarios para hacer frente a los pagos bancarios. "Algunos están en situación muy difícil, ya sea con obra terminada o en construcción, y puede ser un pulmón económico", expone Garrido. La caída de ventas en el sector supera ya el 30% en todo el país.

Caso especial

"El mercado está parado, pero la ciudad vive una situación especial, con poco desarrollo residencial en los últimos años", reflexiona el presidente de Aproin. La construcción se ha ralentizado por la escasez de suelo urbanizable, a lo que se ha unido el periodo de dos años de suspensión de licencias por la tramitación del Plan Xeral -ya aprobado_-, y la paralización aplicada en el centro por la gestión del Plan del Ensanche, aún en fase de elaboración.