Aunque implicados en la misma temática, el cierre de la Casa de Acogida no afecta al trabajo diario del grupo. Eso sí, como todos los equipos de la ciudad que trabajan con mujeres maltratadas, el coordinador de la EVAP explica que "se nos hizo llegar un protocolo provisional para aplicar hasta la entrada en funcionamiento del nuevo centro de emergencia" que atenderá al colectivo. Los policías tienen "un nuevo lugar de referencia" pero que se mantiene en secreto para garantizar la seguridad de las afectadas.
Con ellas se entrevistan una vez al mes como mínimo, en las situaciones menos graves, para actualizar las circunstancias de su caso en la base de datos nacional, aunque sus encuentros son continuos con mujeres en nivel más elevado de riesgo, como cuando se restablece la convivencia con el agresor.
Confidencial
Otro dato importante es que la información que manejan "no la tienen ni nuestros superiores", una media de precaución que se toma para evitar "filtraciones o comentarios" que puedan entorpecer una investigación o poner en peligro a alguna mujer maltratada.
