Este curioso trayecto desde Peinador a Mieres y las circunstancias que lo rodean parecen algo peculiares. Juan José explica que el joven tenía una "pinta normal" y no había incurrido en delitos anteriores, salvo una denuncia por alcoholemia. Sin embargo, fuentes de la investigación que se encarga del caso declaran que el singular cliente era toxicómano y vecinos del pueblo asturiano, que lo conocen por ser un individuo "de cuidado", aseguran que "tenía una pinta tal que nadie se atrevería a subirlo a su coche".

En declaraciones al periódico asturiano La Nueva España, Juan José relató cómo el joven llegó a abalanzarse sobre él.

Bóveda también cuenta que, estando en el cuartel de la Guardia Civil, se dio cuenta de que había marcado ochenta euros al cargar el importe, en vez de ochocientos. "Ahora tendré que devolverlos". Dice haber perdido tiempo, un depósito de gasolina y los cincuenta euros que le dio a su compañero en Vigo. Pero confía en recuperar algún día le dinero que perdió. Ha puesto una denuncia, aunque sabe que la justicia va muy lenta.

Por ahora, al joven mierense se le imputa un delito de estafa y otro de resistencia a la autoridad, ya que se enfrentó a los agentes. No obstante, la investigación percibe "aspectos oscuros" en el caso y no descarta que también se pudiese investigar al taxista.