El director del centro ourensano defiende una regulación para la profesión como la de las demás ingenierías o la arquitectura. "Da un poco de miedo que aplicaciones que son la base de la civilización no estén reguladas", comenta.

- ¿Dará solución a esta carencia el nuevo grado?

- Existe un compromiso para que todas las ingenierías informáticas tengamos contenidos comunes, pero seguimos reclamando las atribuciones profesionales.

- La escuela mantiene una estrecha relación con sus egresados.

- Se potencia no perder el contacto con ellos. Los incorporamos como profesores a tiempo parcial o colaboramos con las empresas que han creado. Son ellos los que pueden transmitirnos sus conocimientos y los alumnos lo agradecen mucho porque consideran que les dan opiniones objetivas sobre el "mundo real". Este contacto permanente es vital.

- ¿Absorbe el mercado gallego a todos sus titulados?

- Muchos se van a otras comunidades, porque los sueldos son mayores en Madrid o Barcelona, pero hay estudios que aseguran que en el mercado gallego hay un déficit. Casi todos encuentran empleo y en un alto porcentaje, antes de acabar.