La inmersión en Europa ha empezado por los posgrados. Durante el curso que está a punto de acabar se impartieron catorce sobre ámbitos tan actuales como la energía y la sostenibilidad o el derecho urbanístico, ¿qué novedades habrá en septiembre?

- Pasamos a tener treinta y ahora el nombre oficial es el de máster universitario. Se trata de ir completando la oferta sin superposiciones. Se seguirán potenciando los másters de perfil profesional, en los que participan empresas que aportan profesorado y prácticas obligatorias para los alumnos, y los que forman a los investigadores. La mayoría de posgrados propios son profesionalizantes y en ellos la Universidad aprovecha su fortaleza en I+D y sus contactos.

- ¿Han hecho una buena labor los centros?

- No hay que perder de vista que los másters son anticipados a los grados y se está haciendo un gran esfuerzo. La Universidad no había afrontado un cambio así en siglos.

- ¿Ha acertado el ministerio al empezar por los másters?

- Desde el principio fue algo muy contestado, pero estos tres años nos han servido como banco de pruebas. Están pensados para graduados, pero todavía no los hay por lo que acceden a ellos titulados y diplomados y esto genera algunos problemas.

- Por tanto, los grados saldrán impecables...

- Los posgrados son más flexibles y si en cinco o seis años no funcionan se extinguirán, pero el grado tiene que ser más estable porque es la formación básica para que te den un empleo. Los posgrados han permitido hacer "experimentos" sin tanto estrés para la comunidad universitaria.

- Hablando de estrés, ¿ha notado mucho en el profesorado?

- El decreto no salió hasta el 30 de octubre de 2007 y todavía hay muchas incertidumbres. Todos estamos ajustándonos. Llegó el momento de trabajar y lo están haciendo a un ritmo muy fuerte. Hay ilusión, pero también muchas dudas y cierto estrés. Nuestro mensaje es que hay que seguir esforzándose, pero rebajando la tensión anímica.

- Algunos se quejan de que este trabajo extra no tiene compensación económica.

- La Universidad tiene unos instrumentos de apoyo a los centros como asignaciones económicas, sesiones informativas o dotación de personal. Los profesores tenemos un salario y unas actividades que realizar. A los de Vigo, como a todos, les toca ahora esta reforma, igual que en otras etapas tocaron otras cosas. Puedo entender estas quejas, pero estamos intentándolo.

- ¿Qué pasará con el alumnado cuando empiecen a impartirse los nuevos grados?

- Es lógico que estén nerviosos, porque oyen cosas de aquí y de allá y no todas son ciertas . El cambio es inminente, pero quienes entren ahora y hasta la implantación del grado tienen garantizados todos los derechos para acabar la titulación que empezaron y con los mismos parámetros de calidad. Es un mandato legal. A ninguno se le obligará a cambiarse al grado, pero haremos pasarelas perfectamente definidas para los que quieran hacerlo y pondré mi empeño personal en que sean generosas.

- ¿Podrán acceder los titulados y diplomados a los másters?

- El acceso de todos los titulados anteriores también está garantizado por decreto. Otra cosa serán las condiciones de admisión, porque un ingeniero podría no entrar en un máster de acuicultura, por ejemplo.