Representantes de los sectores sociales, comerciantes y vecinos se dieron cita ayer en el hotel Los Escudos para asistir al acto organizado por el grupo municipal del BNG, para celebrar el primer año de estancia en el gobierno de la ciudad. Medio millar de personas acudieron a la convocatoria de los nacionalistas, que concluían así los actos de balance que han protagonizado esta semana.

Así, la presidenta de la Federación Vecinal "Eduardo Chao", Elena González; el gerente de la Fundación Provigo; Rubén López, el presidente del Real Club Náutico; Franco Cobas, la presidenta de la Federación de Comerciantes de Vigo, Encarna Álvarez; representantes de sindicatos y otras organizaciones, entre otros, escucharon los "logros" que el Bloque Nacionalista Galego consiguió a lo largo de este primer año de mandato.

El teniente de alcalde, Santiago Domínguez, reconoció que el grupo que encabeza en el Concello decidió realizar un acto abierto al público para hacer balance de la gestión realizada durante los últimos 365 días, un período en el que los seis concejales del BNG "trabajaron para la gente".

Lejos de ser un acto al uso, los concejales nacionalistas no sólo recordaron a los asistentes los proyectos impulsados desde su grupo, sino que también hicieron mención de las iniciativas que se pondrán en marcha en breve.

El teniente de alcalde reconoció sentirse orgulloso y emocionado de estar "ante un numeroso grupo de homes e mulleres". La peculiar forma de echar la vista atrás durante este primer año de gestión municipal fue calificada por Domínguez como "un hecho que constata nuestra política de valentía", en alusión a las posibles voces críticas que podían estar presentes en la sala. El nacionalista recordó sus comienzos en la política local y agradeció a sus compañeros de grupo su labor realizada desde la entrada del BNG en el Concello.

Aunque los colectivos ocuparon la mayor parte del salón del Hotel de los Escudos, diferentes ediles del Bloque de otros concellos, la diputada Olaia Fernández y la secretaria xeral de Benestar, Carme Adán, no quisieron dejar de lado a sus compañeros y se desplazaron a Vigo para apoyar a los ediles nacionalistas que forman parte del gobierno vigués.