El presidente del Eixo Atlántico del Noroeste Peninsular, Luis Filipe Menezes, se mostró hoy preocupado con los posibles atrasos que pueda sufrir la inauguración de la línea de alta velocidad entre Vigo (España) y Oporto (Portugal).

El alcalde de la localidad lusa de Vila Nova de Gaia y antiguo líder del principal grupo de la oposición en Portugal -Partido Social Demócrata (PSD)- dudó de que se cumplan los plazos fijados por los gobiernos ibéricos, que establecen que la línea entrará en vigor en 2013.

"Todavía hay posibilidades de cumplir el objetivo, si trabajamos deprisa, pero, si el ritmo es el que ha sido hasta ahora, no creo que sea posible", dijo Menezes tras la reunión de la comisión ejecutiva de esta asociación, que engloba a 34 municipios de Galicia y el Norte de Portugal.

Durante la reunión, celebrada en Vila Nova de Gaia, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, informó a los socios del Eixo Atlántico de que las autoridades españolas tienen previsto cumplir los compromisos adquiridos con Lisboa y que el tramo entre la ciudad gallega y la frontera portuguesa en Tui estará lista en 2013.

Caballero, vicepresidente del Eixo Atlántico, explicó que buena muestra de este compromiso es que una tuneladora comenzará a trabajar el 1 de enero de 2009 y avanzará 500 metros por mes para construir el túnel por el que pasará el tren de alta velocidad.

En un día en el que el Ejecutivo portugués lanzó el concurso público para la construcción del primer tramo de la línea de ferrocarril de alta velocidad Madrid-Lisboa, el presidente del Eixo Atlántico anunció que escribirán al Gobierno portugués para manifestarles su preocupación por el estancamiento de este proyecto.

"Todo indica que los plazos van a cumplirse en la línea entre Lisboa y Madrid, por lo que sería extremadamente lamentable si eso no ocurriese también en la línea Oporto-Vigo", destacó. La línea de alta velocidad prevista entre las dos ciudades circulará a una velocidad de 250 kilómetros por hora y permitirá tráfico mixto de mercancías y pasajeros