Solamente la Fiscalía siguió adelante con la denuncia contra este colombiano asentado en Vigo. Y es que la víctima decidió retirar la demanda que había presentado contra él y, en su día, también renunció a la protección policial que se le había puesto como consecuencia de esta agresión.

En la breve vista celebrada ayer, en la que su esposo se conformó con las penas, la esposa también intervino. Tras ser consultada al respecto por el titular del Juzgado de lo Penal número 2, la mujer renunció a la indemnización que la representante del ministerio público había solicitado para ella en concepto de responsabilidad civil, y que había fijado en un total de 300 euros.