Nuestros hijos no van a entrar en ese edificio". Los padres de alumnos del colegio Virxe do Rocío, desalojado el pasado viernes al registrarse temblores en la estructura, se negaron ayer a reanudar las clases en el centro. "Los niños llevan diciendo desde hace varios días que el colegio se mueve. El suceso del último día fue la gota que colmó el vaso. Los padres no estamos por la labor de que los niños se expongan a lo peor. Nos da igual que haya un informe que diga que no pasa nada. Que el Concello o Educación los reubique en otro colegio si hace falta, pero a ese edificio no vuelven", advirtió Matilde González, presidente de la Asociación de Nais y Pais (ANPA) del colegio.

El informe de la Consellería de Educación, y que los padres aseguran que no tendrán en cuenta, está ya emitido. Su conclusión es favorable al indicar que la actividad docente en el edificio afectado por las vibraciones puede reanudarse hoy mismo. "Se supervisó el inmueble, tanto el viernes como hoy a primera hora de la mañana [por ayer] y no se encontró ningún tipo de alteración en la estructura. Ya se le ha comunicado a la dirección del centro que mañana [por hoy] puede reanudar las clases", explicaron fuentes de la consellería.

La postura de la directora del colegio coincide con la de los padres. Ángela Novoa se negó ayer a abrir las puertas del edificio, a pesar de que tanto desde Educación como desde el Concello de Vigo garantizaron el viernes pasado que las clases se podrían reanudar ya. "Hasta que tenga un informe por escrito en el que se garantiza que es seguro entrar ahí, yo no voy a arriesgar la vida de 75 niños", aseguraba minutos antes de recibir el comunicado de Educación en el que se le instaba a abrir hoy el colegio. "Yo voy a cumplir con lo que me mandan, aunque los padres ya han dicho que no dejarán que sus hijos entren en el colegio", avisa.

"Daños en los voladizos"

Un técnico de la Delegación de Educación y una aparejadora del Concello de Vigo supervisaron de nuevo la estructura ayer por la mañana, después de que los alumnos que debían dar clase en el edificio fueran reubicados en otro inmueble que pertenece al colegio y que está a escasos metros del afectado por las vibraciones. La Xunta comunicó a la dirección los resultados de su informe y, a pesar de que mantienen que no existe peligro de que el edificio se venga abajo, en el estudio realizado por el Concello -y entregado a Educación- sí se recoge una matización. "El temblor no repercutió en la estructura, aunque sí hay unos voladizos que podrían desprenderse", añaden. Asimismo, reconoce que la conservación del edificio es "regular".

Los que sí reanudarán las clases en el edificio serán los 70 alumnos de la la Escuela Superior de Arte Dramático, situados de forma provisional en el piso superior del edificio y que fueron los que dieron la voz de alarma el viernes pasado. "Si los técnicos dicen que se puede entrar, yo no tengo motivos para dudar de su palabra. El miércoles volveremos", avanza su director, Manuel Francisco Vieites.