El walkie talkie al que llama está apagado o fuera de cobertura. El tradicional mensaje de los teléfonos móviles podría trasladarse a los transmisores de mano de la Policía Local. La comunicación con los agentes se hace "imposible" en multitud de zonas del centro, como Gran Vía o Jenaro de la Fuente, pero también en puntos como Peinador y Samil, y en prácticamente todas las parroquias. Una sola antena -situada en O Castro- impide que la señal llegue a toda la ciudad. Una carencia que está mermando el trabajo de los agentes y que pone en cuestión su capacidad de reacción.

Los Policías Locales se han visto obligados a trabajar en la "sombra" en zonas como O Calvario, la Doblada, Jenaro de la Fuente o en el tramo de la Gran Vía entre Plaza de España y América. "En este último -precisa uno de los agentes- depende de en qué lado de la calle nos encontremos. Pegados a los edificios la cobertura es nula; enfrente se escucha con interferencias".

El Sindicato Independiente del Concello (Sico) ha denunciado este problema en reiteradas ocasiones. "Seguimos teniendo un ángel en esta ciudad", se consuela Manuel Sánchez. Los agentes temen que llegue el día en el que se produzca un incidente grave en alguna de estas zonas. "Estaríamos incomunicados. La única alternativa sería la de hablar desde el coche patrulla, pero en una intervención no puedes andar yendo y viniendo. También podemos utilizar nuestro móvil particular, como hacemos ahora muchas veces", ironizan.

La Policía Local contabiliza casi 15 puntos donde la señal es nula. La mayoría están localizados en las parroquias donde, además, las interferencias son una constante. "Cada día descubrimos lugares nuevos en los que o no hay cobertura o es tan baja que apenas se puede entender", critican. Desde la empresa que se encarga del mantenimiento del sistema de la Policía Local argumentan que tanto la antena como los repetidores están orientados hacia el centro por orden del Concello. Un hecho que explicaría que no haya cobertura en zonas como Samil.

La falta de señal en Peinador preocupa en especial manera a los agentes de policía. "Se trata de un punto neurálgico en el que los transmisores no funcionan. El día que pase algo, tanto en el aeropuerto como en el Ifevi, no sé cómo vamos a hacer", aseguran.

La Policía ya vivió una mala experiencia en Peinador en 1994, cuando un avión perdió el tren de aterrizaje, resbaló por la pista y comenzó a arder con más de 100 pasajeros a bordo. "Ya entonces no había cobertura. Recuerdo como teníamos que ir corriendo hasta los coches patrulla para poder comunicarnos", afirma uno de los agentes que intervino en aquel suceso y en el que no hubo que lamentar víctimas mortales.

Unas carencias que podrían tener solución en cuanto se instale la antena prevista en el monte Cepudo, en la parroquia de Valladares.

Tres funcionarios atienden una media de 1.500 llamadas al día

Todas la llamadas de emergencia de los ciudadanos, las consultas por emisora que realizan los agentes y gran parte de las comunicaciones interiores de la Policía Local pasan por la centralita del cuerpo de seguridad. Un departamento en el que trabajan sólo tres personas. "Eso en el mejor de los casos. No es la primera vez que se quedan sólo dos", denuncian desde el Sico.

La centralita de emergencias del 092 -que se reformó en agosto del año pasado- no está cumpliendo con las expectativas marcadas por el anterior concejal de Tráfico y Seguridad, Antonio Coello. "Cada día hay una media de 500 llamadas del exterior. Conseguir que te cojan el teléfono puede llevar hasta 10 minutos. No olvidemos que es un número de emergencias. El sistema es bueno, pero falta que se explote al cien por cien".