El inicio de las obras de mejora ambiental y accesibilidad de la playa de O Carril, prevista desde hace meses, ha obligado a levantar sesenta carballos plantados por alumnos de los colegios "Rosalía Castro" y "Eijo Garay" a finales del pasado mes de febrero, dentro de la campaña "Axuda a vivir: Doa sangue e pranta unha árbore" en la que participó el alcalde y miembros del gobierno local.

Los árboles fueron arrancados el lunes a primera hora de la mañana y, según fuentes municipales, quedaron bajo la tutela del departamento de Medio Ambiente. Desde Parques y Jardines se confirmó que son empleados en la plantación que se lleva a cabo desde hace unos días en los montes vecinales de Coruxo.

Desde el propio Concello se reconoció que la plantación en Alcabre fue temporal, ya que se tenía constancia del inminente inicio de las obras de acondicionamiento, que fueron adjudicadas por el equipo de gobierno a finales del pasado año, pero que se llevó a cabo porque fallaron otras ubicaciones previstas y para mantener la campaña de concienciación prevista. Los árboles habían sido cedidos por la Junta de Montes de Candeán y como primera ubicación se había barajado una parcela situada frente la estación de autobuses, a la altura del arranque de la avenida Arquitecto Palacios, pero las malas condiciones del terreno y la falta de tiempo para prepararlo lo desaconsejaron.

La obra

Con la mejora ambiental y de accesibilidad al arenal de Carril se pretenden solucionar los problemas de arrastre de tierras que afectan a la playa, conservando la potencialidad de la zona afectada como espacio de ocio pasivo vinculado a los usos recreativos característicos de la playa, mejorar los accesos al arenal, con una intervención "·blanda", sin estructuras que interfieran en los criterios de conservación derivados de la legislación de costas y caracterizada por la reversibilidad y, también, adecuar el espacio de intervención para uso recreativo de carácter pasivo y establecer medidas de protección que garanticen el uso exclusivamente peatonal de ese espacio que hasta ahora era utilizado mayoritariamente como zona de aparcamiento por los usuarios de las playas de Carril y Santa Baia.

Con la mejora ambiental del entorno de esa playa se trata también de desarrollar intervenciones caracterizadas por la reversibilidad, con el objeto d no interferir en el futuro planeamiento de ese espacio recreativo asociado al paseo litoral que se pretende llegar a completar entre Bouzas y Canido. Las obras están presupuestadas en 115.000 euros y el plazo es de dos meses.