El presidente del PP de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, considera a Vigo "epicentro de la grave crisis sanitaria que atraviesa la comunidad" y ayer mismo recriminaba a la Consellería de Sanidade por aprovechar este momento para "recortar prestaciones, cerrando doce de los trece centros de salud que abren en la ciudad los sábados por la mañana y dejando abierto únicamente el de Coia para dar servicio a 300.000 habitantes".

Acompañado de la concejal Lucía Molares, el diputado autonómico Ignacio López-Chaves y el portavoz de Sanidad del partido, Miguel Santalices, el líder de los populares gallegos advirtió a los vigueses de que "la decisión está tomada desde hace días y tan sólo está pendiente de aplicación".

Feijóo incluso se aventuró a poner fecha a esta hipotética reestructuración de los centros de Atención Primaria de Vigo para el próximo sábado 24 de mayo y detalló que los cambios supondrán "una reducción de la plantilla en dos tercios, pasando de los 18 médicos que hasta ahora quedaban de guardia los sábados a tan sólo seis facultativos".

El polémico anuncio realizado a mediodía levantó polvareda en el seno de la Consellería de Sanidade, que horas más tarde desmentía el recorte de prestaciones en el área sanitaria de Vigo y calificaba de "rocambolescas" las afirmaciones del presidente del PP gallego.

"Nada más lejos de la realidad. No sólo no cerrarán los centros que tienen guardia actualmente, sino que este Gobierno se tiene caracterizado por ampliar servicios. Aumentó el número de centros con asistencia vespertina y sólo en el primer trimestre de este año incorporó 43 nuevos profesionales de Primaria al área sanitaria de Vigo". En estos términos replicaba Sanidade las duras acusaciones del líder de los populares de Galicia, al que advirtió de que "carece de legitimidad para cuestionar los avances sanitarios, cuando el Gobierno de Manuel Fraga tenía ocultos 7.608 pacientes en un centro concertado".

Nuevo hospital

Núñez Feijóo aprovechó su visita para referirse además a la construcción del nuevo hospital de la ciudad, entre Beade y Valladares, que tiene el inicio de las obras fijado para principios del próximo año y del que se espera que esté operativo en el año 2012.

Así lo anunció el secretario xeral del Sergas el pasado martes, pero los plazos ofrecidos por Cayetano Rodríguez no convencen al presidente del PP, que ayer ponía en duda su ejecución en 36 meses cuando "aún no está listo el proyecto constructivo".

Feijóo recordó que el hospital de Lugo, con 900 camas, tuvo un periodo de ejecución de siete años, por lo que ahora se pregunta "¿cómo van a construir uno de 1.400 en tres?".