Personajes como Melissa Agretti, a la que daba vida Ana Alicia; Chase Gioberti, encarnado en Robert Foxworth; Maggie Gioberti, en Susan Sullivan; Richard Channing, en David Selby, y Ángela Channing a la que inmortalizó la desaparecida Jane Wyman. "La última vez que nos vimos fue hace un año y a todos nos gustaría volver a trabajar juntos", ha comentado el actor.

Pero Lorenzo Lamas, a sus 51 años, no tiene un pelo de tonto y como lleva bastante tiempo sin que le ofrezcan un papel para el cine o la televisión, por "la sencilla razón de que la industria siempre ha estado enfocada a los más jóvenes", este coleccionista de Harley Davidson, prepara el lanzamiento de una serie de motos diseñada por el, con ropa y joyas a juego, que se llamará "Lorenzo Lamas Cycles".

También ultima con su hija mayor Shyme, "un reality sobre la relación entre ella y su hermana pequeña", que se llamará "La vida Lamas" y que se emitirá en junio en la televisión Entertaiment Channel de Estados Unidos.

"Los programas de este tipo son los que están quitando el espacio a las series de calidad, son baratos y tienen mucha audiencia", comenta el actor, que prefiere programas como "Los Soprano" y al que le gustaría rodar una comedia de situación tipo "Cheers".

El primer papel importante que Lamas rodó para el cine fue el del bobalicón de Tom Chisum en la película "Grease" (1978). "Tenía 19 años, era mi primer trabajo serio y me ofrecía la oportunidad de participar en un documental que ha hecho historia", asegura el actor.

Fruto del matrimonio entre los actores Fernando Lamas y Arlene Dahl, e hijastro más tarde de Esther Williams, a Lorenzo Lamas no le cuesta decir que si "volviera a nacer estudiaría empresariales". "Mi padre -recuerda- siempre me decía que nunca esperara el éxito rápido, que me dedicase a lo que quisiera, pero que nunca hiciera algo de lo que me tuviera que avergonzar, y eso es lo que le digo yo a mis hijos".

Y es que aunque vestido del típico motero, con pelo largo, una gran anillo en forma de ancla y un moreno californiano muy curtido, Lorenzo Lamas es un padrazo que comenta -en broma y en referencia a un anunció de colchones que rodó en España en los años 80 en pleno éxito de "Falcon Crest"- que ser "el rey de las camas es una arma de doble filo, porque el resultado de todo eso han sido seis hijos y varios matrimonios".

"Los rodajes de Falcon Crest eran tranquilos, teníamos mucho tiempo para aprender el guión, sólo rodábamos dos o tres días a la semana, y eso me permitía hacer mis gamberradas con las motos y tener mucho tiempo para casarme varias veces seguidas", volvía a bromear.

"Falcon Crest" cuenta las vicisitudes, intrigas y peripecias de dos familias californianas entregadas a la viticultura -los Channing, que viven en una gran mansión, llamada "Falcon Crest", y los Gioberti- en su pugna por controlar los viñedos y las bodegas del ficticio Valle de Tuscany.

La serie, de la que Warner publica en España la primera temporada -cuatro discos con 18 episodios- de las nueve que se llegaron a rodar, era un dispendio de lujo, intriga, sexo,..."puro entretenimiento", asegura Lamas, quien cree que en el "mundo actual en el que vivimos, lleno de amenazas, crímenes, enfermedades...etc, una serie como ésta tendría su sitio, porque nos permitiría olvidarnos de todos esos problemas".