Según recoge hoy la edición digital de la publicación, Barbara y Jenna Bush, de 27 años, evalúan en la revista People sus ocho años en la Casa Blanca, cómo esta experiencia ha cambiado a sus padres y opinan sobre los nuevos inquilinos que se instalarán en la residencia presidencial el próximo 20 de enero.

Preguntadas por qué consejo les darían a las hijas del presidente electo, Barbara cuenta cómo hace unos días les enseñaron la Casa Blanca y los pequeños secretos que ésta escondía.

Su hermana, Jenna, se sumó a la respuesta y añadió que "ellas son muchos más jóvenes que nosotras y más lindas. Nosotras ya pasamos de moda".

"Incluso, el cachorro va a ser más lindo (que el nuestro)", bromeó Barbara.

En cuanto a su padre, las hijas del actual presidente aseguran que a pesar de sus dos mandatos no ha cambiado mucho.

"Ahora está un poco mayor, obviamente", señala Jenna, quien dijo que "ha estado bajo mucha presión así que estamos listas para que vuelva a Texas".