El propio Brown hizo esta confesión en una entrevista televisiva en la que el conocido empresario convertido en presentador Alan Sugar le preguntó si había sido golpeado con la palmeta cuando estaba en el colegio.

"Con el cinturón, sí", respondió el jefe del Gobierno, durante cuya escolarización en la década de los años 60 era aún legal en Gran Bretaña el castigo físico y corporal a los alumnos.

Brown precisó incluso que la temida correa, una cinta de cuero con varias colas conocida como Lochgelly Tawse, se fabricaba en la que es ahora su circunscripción electoral.

Un amigo del primer ministro explicó al periódico "The Mail on Sunday" el incidente que motivó el castigo.

El director de la escuela de secundaria de Kirkcaldy, Robert Adam, se enteró de que un grupo de alumnos planeaba hacer novillos para ver por televisión un partido entre Escocia e Italia de clasificación para el Mundial de 1966, explica el rotativo.

"Pasó en diciembre de 1965, cuando Gordon tenía 14 años", declara la fuente al periódico.

"El director dijo en la asamblea que se había enterado de que un grupo de chicos planeaba hacer novillos para ver el partido, y que eso no sería tolerado. Agregó que si había alguien desesperado por verlo, debería ir a su despacho para hablar del tema", explicó el amigo.

Brown, un alumno tan precoz que ingresó en la universidad con sólo 16 años, acudió junto con otros compañeros a la oficina del director, que le esperaba con la correa en la mano.

"Los chicos pensaban que tal vez iba a poner un televisor en alguna de las aulas, pero, en lugar de eso, los cogió uno a uno y les dio unos buenos correazos, y les dijo que si volvían a intentar hacer novillos, les pegaría cada día durante un mes", indicó la fuente.

"Al final, Escocia fue derrotada por 3 a 0, así que no se perdieron mucho", añadió.