El encuentro casual con Betancourt se produjo cuando la franco-colombiana salía del despacho de Fernández, en la Casa Rosada, sede del Ejecutivo argentino, y Madonna entraba para ver a la gobernante argentina.

La estrella del pop llegó vestida con un traje blanco y acompañada de una fuerte custodia que restringió las fotos que funcionarios y empleados de Casa Rosada pretendían tomarle.

Madonna aprovecho la visita para recorrer los salones de la Casa del Gobierno, donde en 1999 rodó la recordada escena de la película "Evita" en el balcón de la Casa Rosada.

La cantante llegó este lunes a Buenos Aires junto a sus tres hijos y una comitiva de 220 personas para ofrecer cuatro conciertos en la capital argentina.

La "diva del pop" arribó en un avión privado para ofrecer desde el miércoles una seguidilla de recitales en el estadio River Plate de la ciudad de Buenos Aires, escogida para realizar las filmaciones para el vídeo de su gira "Sticky & Sweet".