Y el elegido no es otro que Donald Trump, uno de los hombres más ricos del mundo, con el que cenó hace unos días y con el que, según los testigos de la cita, ella no dejó de coquetear.

La excusa de la cena no era otra que firmar el contrato como jurado del concurso Miss Estados Unidos, organización que preside Trump. Según informaciones de 'music-news.com' recogidas por otr/press, la ex mujer de McCartney quiso quedar con el magnate para pedirle una subida de caché por acudir al certamen que será televisado. "En un principio ella rechazado el contrato porque quiere que conste que le pagarán si ellos revenden las imágenes". Una fuente comentó al 'New York Post' que Mills tiene cada vez "el ego más grande" y que cree que si el espectáculo tiene mucha audiencia será gracias a ella.

Pero lo que realmente trascendió de esa cita es la actitud de Mills durante la cena. "Heather fue con Donald a la cena en 'Koi' la noche antes del desfile. Ella coqueteaba con él, y se esforzaba en ello". Finalmente parece que los flirteos dieron resultado y los organizadores de desfile tuvieron que ajustar el contrato según lo que Mills demandaba.

Con la amistad de un hombre tan importante como Trump, la activista quiere hacer carrera en américa, dice un allegado. Según este amigo de la ex del intérprete de 'Yesterday', ella le dijo: "En Inglaterra, no le gusto a la gente. Pero voy a mudarme a América, a Los Angeles, probablemente estaré mejor en Estados Unidos".