La reparación del viaducto de la A-6 que se desplomó hace tres semanas va para largo. Entretanto, el Ministerio de Transportes trasladó ayer a Xunta y empresarios un plan alternativo para la circulación de vehículos y camiones, que ahora mismo tienen que desviarse hacia la carretera nacional y cruzar Pedrafita, lo que supone retrasos importantes en los tiempos de conexión de Galicia con la Meseta. La idea del Gobierno es construir un bypass entre la A-6 y la N-VI que acorte de 10 a solo 4 los kilómetros que los vehículos tienen que circular por la nacional. Las obras necesarias para ponerlo en marcha ya comenzaron el 23 de junio y el objetivo es que la solución esté lista para su entrada en funcionamiento a partir del mes de agosto.
Con este nuevo desvío, el tiempo de recorrido quedaría reducido a menos de la mitad de lo que se tarda con el actual. De este modo un vehículo ligero en dirección A Coruña, que hoy tarda 8 minutos 45 segundos en hora valle, pasará a emplear tan solo 3 minutos 50 segundos. En hora punta la reducción es aún mayor, de modo que un vehículo pesado tardará algo más de seis minutos frente a los 15 actuales.
Además se va a habilitar el paso de los vehículos en sentido Madrid por el túnel de Pedrafita, manteniendo el sentido a A Coruña por la travesía de Pedrafita do Cebreiro. Las obras comenzarán el próximo lunes.
Posición de la Xunta
El secretario general de Infraestruturas, Xavier Flores, trasladó ayer esta propuesta a la Xunta en una reunión en Pedrafita. La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, advirtió que la alternativa propuesta por el Ministerio de Transporte permite la movilidad en dirección Madrid, pero el tráfico que circula en dirección A Coruña tendría que hacerlo por la travesía de Pedrafita y además critica que no se da solución al transporte de vehículos especiales.
Ethel Vázquez pidió al Gobierno que se esfuercen en el diseño de esta alternativa puesto que, según advierte, la solución definitiva “se va a alargar en el tiempo”.
La responsable de Infraestruturas de la Xunta lamentó además que tres semanas después del derrumbe del primer vano del viaducto de la A-6 todavía no se hayan esclarecido las causas.
La secretaria de Estado de Transportes, Isabel Pardo de Vera, mantuvo por la mañana un encuentro telemático con representantes de las organizaciones empresariales y empresas de logística y transporte. En esta reunión, la patronal le pidió “la mayor celeridad posible” en la adopción de medidas para “minimizar” los efectos para el tejido empresarial del desplome del puente de O Castro.
