Después de que el paro del personal de la Administración de Xustiza llegase a su fin el pasado viernes al aceptar tres de los siete sindicatos la propuesta salarial de la Xunta, se avecina otra larga negociación para poner al día los 17.000 juicios y decenas de miles de trámites suspendidos desde que comenzara la huelga hace más de tres mes. La Comisión Mixta integrada por el Tribunal Superior de Xustiza (TSXG) y la Dirección Xeral de Xustiza se reunió ayer por primera vez para abordar las líneas de trabajo.

Todavía no se ha concretado el coste que supondrá -aunque estiman que requerirá "un importante esfuerzo económico- ni su duración pero ya se calcula que no podrá arrancar por lo menos hasta septiembre debido "al problema añadido de las vacaciones de verano". Así lo confirmó ayer el presidente del TSXG, Miguel Ángel Cadenas, quien señaló que ahora lo fundamental es analizar el grado de incidencia de la protesta en los distintos órganos judiciales, es decir, "actualizar la pendencia del servicio de notificación y reparto para ver los asuntos pendientes".

En este sentido, abogó por un plan "realista" y "caminar con cabeza y despacio". Por su parte, el vicepresidente gallego, Alfonso Rueda, recordó que el plan afectará no solo a los funcionarios, sino a todo el personal que depende del Ministerio de Justicia, por lo que la Xunta reclamará "la implicación" del departamento estatal y la participación de jueces, fiscales y secretarios judiciales.

Por otra parte, los sindicatos que siguen en el comité de huelga -CUT, CIG y STAJ- acordaron ayer presentar quejas ante la Valedora y el Defensor del Pueblo por la forma en la que se cerró el conflicto.