La comisión del Congreso de los Diputados que investigará las causas del accidente del tren Alvia ocurrido en Angrois (Santiago) en julio de 2013, en el que murieron 80 personas, echó a andar ayer dando un plazo de un mes a los partidos para presentar sus planes de trabajo, incluyendo listas de comparecientes y documentación solicitada. Su constitución se produce casi cinco años después del siniestro y después de estar congelada siete meses ante la incapacidad de los grupos parlamentarios de ponerse de acuerdo para decidir quién debía presidir este órgano. Su puesta en marcha se debió al cambio de postura del PSOE, que se había opuesto, como el PP, a su creación.

La presidencia de la comisión, que analizará un siniestro que también está bajo investigación judicial, recayó en el portavoz de interior del PDeCAT, Feliu Joan Guillaumes, elegido por unanimidad pese a los recelos iniciales del PP. En la mesa del órgano parlamentario también se sentarán el socialista César Ramos, como vicepresidente primero; el popular José Alberto Herrero, como vicepresidente segundo; el diputado de En Marea Antón Gómez Reino, como secretario primero; y Concepción de Santa Ana, como secretaria segunda, en representación del PP. Se ha quedado fuera Ciudadanos.

Guillaumes pidió a los diputados mostrar "la máxima sensibilidad y delicadeza" para con las víctimas, que exigían una investigación parlamentaria desde hacía tiempo, porque se expondrán hechos "dolorosos" y garantizó su esfuerzo para intentar alcanzar acuerdos, algo que a priori parecen "imposible". Prevé que sus trabajos se prolonguen más allá de los seis meses previstos inicialmente, informa Europa Press.

Su composición es proporcional al peso en la Cámara, con cuatro representantes del PP, tres de PSOE y otros tres de Unidos Podemos, dos de Ciudadanos y otros dos del grupo mixto. ERC y el PNV, por su parte, contarán con un diputado cada uno.

La diputada de En Marea Alexandra Fernández anunció ya que el grupo confederal de Unidos Podemos del que forma parte pedirá al menos cinco comparecencias: el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, y sus antecesores, los populares Ana Pastor y Rafael Catalá y el socialista José Blanco; y el director de Renfe en el momento del siniestro, Julio Gómez-Pomar.

El diputado del PP Celso Delgado garantizó la actitud "constructiva" de su formación. La socialista Pilar Cancela garantizó la "profesionalidad" del PSOE y el respeto hacia las víctimas.