En Marea sigue sin solucionar el conflicto generado tras el altercado de su diputada Paula Quinteiro con la Policía Local de Santiago y ha sufrido otra crisis con el anuncio de dimisión de su compañero Juan Merlo por haber mentido en su currículo y atribuirse una carrera de ingeniería de la que carece. El portavoz rupturista, Luís Villares, usó este último caso para presionar a Quinteiro y demostrar la diferencia entre En Marea y el PP. “[Merlo] dejó en un uar muy alto y ejemplar la ética de En Marea. Hay dos modelos: el nuestro y el del PP”, expuso.

Villares volvió a esquivar cuándo se fijará la consulta a las bases sobre el futuro de Quinteiro que anunció hace dos semanas si esta no renunciaba y para dirimir el conflicto entre la dirección del partido, favorable como él a que deje la Cámara, y el grupo parlamentario, contrario a la medida al menos hasta que se analice el caso de forma pormenorizada. “Cuando llegue el momento lo evaluaremos”, respondió sobre la consulta, que no fue analizada por la coordinadora de En Marea en su reunión de la semana pasada, a pesar de la intención de varios de sus miembros a ponerla sobre la mesa.

Aun así, el exmagistrado insistió en situar la pelota en el tejado de Quinteiro, a la que ya advirtió en otras ocasiones de que tenía la llave para poner fin a la crisis generada por la gestión de su altercado con la policía, que no produjo ninguna denuncia. “Cuando concluya el proceso de reflexión, saldremos reforzados porque se verán dos formas abismalmente diferentes de entender la policía”, alegó antes de poner ejemplos de las diferentes varas de medir entre su formación y el PP.

Villares contrapuso el anuncio de dimisión de Merlo con casos en las filas del PP. Citó a la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, que constaba como licenciada en Químicas en su currículo cuando no concluyó la carrera, como ella reconoció. También se refirió a la diputada del PP ourensano en el Congreso Ana Vázquez Blanco, en cuya biografía “aparecen y desaparecer másters”, censuró en alusión a la polémica generada por el caso Cifuentes.

También insistió en denunciar la negativa de Alberto Núñez Feijóo, presidente de la Xunta, en revelar qué delegado del Gobierno en Galicia le informó de la existencia de las fotografías en la que aparecía de vacaciones en los años 90 con el contrabandista Marcial Dorado, condenado posteriormente por narcotráfico.

Más tarde, Podemos se refirió a sus palabras y defendió esta tarde la renuncia de Merlo, que ya registró su dimisión en el Parlamento, para diferenciar su organización del PP, pero criticó la comparación realizada por Villares entre su caso y el de Quinteiro.

No entiendo las declaraciones de Luís [Villares], le debéis preguntar a él. Los gallegos tienen problemas más graves y estas cuestiones hay que gestionarlas donde hay que gestionarlas”, censuró Carmen Santos, líder de Podemos en Galicia.

Protestas sociales

La alta "conflictividad social" detectada por En Marea fue el centro de la intervención de esta mañana de Villares, que se refirió a la huelga de justicia, a las protestas de los pensionistas y al paro estudiantil convocado para el jueves como muestra del "malestar social y laboral" existente.

"La gente estuvo dispuesta a sacrificios durante la crisis, pero la sociedad no admite que pasada la crisis no se recuperen sus derechos. Eso es un robo", expuso sobre la precariedad laboral y los bajos salarios. Además, vinculó las protestas con la "esperanza de cambio" en la Xunta, que, añadió, representa En Marea.,