La gestión del incidente de Paula Quinteiro, que se saldó sin ninguna denuncia policial ni contra ella ni contra ninguno de sus acompañantes, ha agrietado En Marea y trasladado el foco sobre el liderazgo de Luís Villares, al que el PP atacó ayer. "Es parte ya del pasado de la política gallega y debería pensar en abandonar una política en la que su voz no cuenta y su palabra no tiene peso", espetó el secretario xeral de los populares gallegos, Miguel Tellado.

En Marea debutó en las autonómicas de 2016 y alcanzó 14 actas, empatando con el PSdeG, pero superándolo en votos, por lo que lidera la oposición gallega. El PP cree que la gestión de la crisis la "desacredita como primera fuerza de la oposición". Además, prosiguió sus ataques a Villares, afeándole que en las primeras reuniones del grupo parlamentario apoyase pedir el acta de Quinteiro -de negarse, el grupo podría expulsarla al mixto- y luego se abstuviese tanto en el Consello das Mareas -donde representó la posición el grupo- y en el último cónclave interno en la Cámara.

En esa estrategia de colocar el foco en el exjuez del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, los populares colgaron en la red social Twitter un fotomontaje sobre dibujos de la serie The Simpsons en el que colocaron el cartel de En Marea en el rostro del supuesto asesino de un personaje que yace en el suelo. En su cabeza situaron la de Villares bajo el encabezamiento: "dejadlo, ya está muerto".

El partido retiró poco después el mensaje.Alegó que Tellado iba a pronunciarse sobre la polémica y querían focalizar la atención en la figura del número dos del PPdeG.