Evitar la ruptura de En Marea en el Parlamento a un año de las elecciones municipales es la prioridad en la gestión del caso Paula Quinteiro en opinión de la líder de Podemos en Galicia, Carmen Santos, que ayer no solo reiteró su defensa de la diputada, sino que acusó al PP de tratar de "destrozarle la vida por tacticismo" y de hipocresía al exigirle a esta que dimita mientras "premia" con un ascenso al Ministerio de Sanidad a la alto cargo de Sanidade investigada por homicidio en la muerte de seis enfermos de hepatitis C a los que no llegaron los medicamentos más avanzados. "Es inhumano", dijo.

La gestión del caso Quinteiro ha intensificado la crisis interna de En Marea. Todo comenzó la noche del viernes 16 al sábado 17, cuando la Policía Local de Santiago identificó a un miembro del grupo con que ella se encontraba tras una denuncia vecinal por vandalismo. La joven, inscrita de Podemos, se identificó con el carné de parlamentaria, comportamiento injustificable para el Consello das Mareas, el máximo órgano del partido instrumental, que le pidió la renuncia. El grupo parlamentario desoyó esa mera "declaración política" y mostró el choque interno entre la mayoría que controla el Consello, con la que pactó el portavoz Luís Villares para hacerse con el puesto, y los representantes parlamentarios. El Consello guarda silencio.

La dirección de Podemos -siete de los 14 diputados de En Marea son inscritos de este partido- evitó ayer censurar al Consello al recordar que no forman parte de esa formación instrumental y pidió cerrar filas, al tiempo que reiteró la autonomía de los diputados. "Es fundamental que el grupo siga unido hasta el final de la legislatura", expuso la líder morada en Galicia, Carmen Santos.

Esta sostuvo que Quinteiro no "transgredió" ningún código ético del espacio rupturista y reconoció las dificultades para gestionar el caso, si bien rechazó que el PP "marque la agenda política" de la oposición. "Somos críticos", se diferenció del partido que gobierna el Estado y la Xunta y acusó a Mariano Rajoy de "cobrar en B", en alusión a los papeles de Bárcenas, y afeó a Alberto Núñez Feijóo sus "viajes de placer con el narcotraficante Marcial Dorado". "De eso no quiere hablar Feijóo", añadió.

Tampoco valoró el posible coste electoral de esta crisis, al igual de los tres alcaldes urbanos de las mareas. Martiño Noriega (Santiago) y Jorge Suárez (Ferrol) rehusaron referirse al caso, aunque sí lo hizo el de A Coruña, Xulio Ferreiro, para, de forma implícita, posicionarse con el grupo parlamentario. "Ayer se pronunció el grupo parlamentario y ya está, ahí está la conclusión", expuso, informa Europa Press, si bien añadió que "sería mejor que coincidiesen" este y el Consello das Mareas, donde Marea Atlántica está en el bando crítico.

Carmen Santos - Secretaría Xeral de Podemos

"El PP machaca a una mujer y es inhumano. Hay líneas rojas que no deberían pasarse"