Tras dos años de crecimiento "estable" y con un PIB en "niveles precrisis", "ya no hay motivos suficientes para que la recuperación no se traslade ese crecimiento al mercado de trabajo. ¿Cómo? Que los empleos sean más estables, más indefinidos, y la otra vía es por el incremento de los salarios". Así lo defendió ayer el economista José Luis Armesto, autor de un estudio sobre salarios que incluye el Foro Económico de Galicia en su informe de coyuntura relativo al tercer trimestre, que presentaron ayer en Santiago el director y subdirector de la institución, Santiago Lago y Patricio Sánchez, respectivamente, y el coordinador de la publicación, Fernando González Laxe.

Este último también aludió a que pese a que el crecimiento de la economía gallega es "prolongado y estable", no se debe a la demanda interna. De hecho, llamó la atención sobre que "el consumo ha descendido mucho", lo que "no es un buen síntoma", y que eso tiene relación con "la estabilización o descenso de los salarios y con la dificultad de generar empleo".

También Santiago Lago advirtió de que la "calidad del empleo" y el "crecimiento inclusivo" son dos problemas a los que Galicia y España deben hacer frente, dado que incide en cuestiones demográficas, como la decisión de tener descendencia, pero también políticas.

Por otro lado, aunque la economía gallega encadena ocho trimestres consecutivos con un crecimiento del PIB por encima del 3% y podría cerrar el ejercicio por encima de esa cifra, según apuntó Lago, Fernando González Laxe advirtió de que el modelo es "vulnerable" e "inestable" y subrayó la "caída fortísima"del sector manufacturero. Apuntó que "las políticas industriales, las agendas industriales, no están dando resultados". "Todos esos programas", avisó, "no están provocando la consolidación del sector industrial, sino la desindustrialización de Galicia".