Técnicos de la Consellería do Mar han iniciado las labores para evaluar posibles afecciones en los bancos marisqueros como consecuencia del temporal de lluvia y viento de las últimas horas, que ha producido corrimientos de tierra y el arrastre de las cenizas generadas en los incendios de mediados de octubre.

Personal de la Dirección Xeral de Desenvolvemento Pesqueiro y de las cofradías han acudido a Baiona y A Guarda para evaluar la situación; el Servizo de Gardacostas revisa las zonas de Arcade y Baiona, donde ya se ha detectado "agua turbia y restos de ramas"; y técnicos están inspeccionando las desembocaduras de los ríos Miñor y Verdugo.

En relación con ello, la Xunta ha incidido en que el personal está alerta y se mantendrá el seguimiento en las zonas susceptibles de afectación de los bancos marisqueros próximos a los montes quemados para "evitar desprendimientos, corrimientos de tierra o alteración de los cursos fluviales".

En caso de que se registren daños en los bancos marisqueros vinculados al arrastre de materiales procedentes de montes quemados, la Administración autonómica ha recordado que, dentro de las ayudas puestas en marcha tras la ola de incendios, hay un millón de euros dispuestos para hacerle frente a la situación y subvencionar los trabajos para recuperar dichos bancos marisqueros.Temor en las cofradías

Las cofradías temen que el arrastre de cenizas y tierra a los ríos acabe notándose en las desembocaduras y en las propias rías, por los perjuicios que esto tendría en bancos marisqueros y para la pesca.

El patrón mayor del pósito San Juan de Redondela, Clemente Bastos, ha explicado que, de notarse, el impacto no llegará hasta este martes o miércoles, por la experiencia que tienen en esta localidad los profesionales.

"Lo veremos durante la semana, por ahora aún no se nota nada porque no es instantáneo", ha expuesto, antes de subrayar el miedo por que se produzcan daños "en plena campaña" marisquera.

Fuentes de la cofradía de Vigo y de la de Baiona coinciden en que de momento no se ha podido comprobar la llegada de cenizas y tierra, ya que los mariscadores no han ido a trabajar en una jornada con muy mal tiempo.

"La ceniza puede llegar, pero dependerá del volumen que llegue si tiene efecto o no sobre el marisqueo", apuntan las fuentes consultadas del pósito vigués.

También los gobiernos municipales de las localidades afectadas por los incendios, como Ponte Caldelas, Nigrán y Gondomar, se encuentran atentos a cualquier posible contaminación de los ríos por las cenizas, si bien se encuentran a la espera de que baje el caudal para poder comprobar si ha habido tal afectación.

Un marco en el que el alcalde de As Neves, Xosé Manuel Rodríguez, ya ha confirmado que las escorrentías han hecho que "gran parte" de la tierra arrastrada acabase en los cauces del río Miño, "y alguna seguramente está ya en el Atlántico". Así, ha ratificado que las cenizas han llegado al agua, si bien ha aclarado que la de consumo humano no está afectada.