En Primaria los alumnos tienen entre 6 y 12 años. Llama la atención, a tan corta edad, detectar malos comportamientos y agresiones que terminan en expediente disciplinario. Son pocos, pero Anpe los destaca para que la sociedad sea consciente de que existen y la tendencia pueda corregirse a tiempo. En el curso 2016/17 se abrieron 86 expedientes, el triple que en 2008/09, cuando se contabilizaron solo 29.

Mandar al alumno unos días a casa, clases de refuerzo, sesiones con orientadores o cambios de centro son las medidas que se ponen en práctica en esta etapa, si bien los profesores "hacen lo posible para no llegar a esas situaciones". FP Básica es otro de los puntos complicados, multiplicándose por cinco desde el año 2008-09: de 26 a 127 expedientes. Díaz destacó la "tranquilidad" general, si bien hizo una llamada a "la desatención en casa" y a no trasladar la responsabilidad del proceso educativo a los colegios.