Desde la catedral de Santiago quieren darle la vuelta al tópico "cerrado por obras" para convertirlo en "abierto en obras", como señaló ayer el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, o, más bien, a pesar de las obras. Y es que si hasta ahora el proceso de lavado integral de cara que está afrontando la basílica compostelana para que en el Año Santo de 2021, como dijo el conselleiro, se halle "en perfecto estado de revista" ha afectado sobre todo al exterior, el año que viene y el siguiente, 2018 y 2019, está previsto que el "lifting" se realice también de puertas adentro. Por ello, el culto se verá "reducido en aforo y horarios", admitió ayer el director de la Fundación Catedral, Daniel Lorenzo, que indicó que la actividad estará afectada sobre todo "en 2018 y 2019" pero que la información exacta se dará a conocer a través de un boletín periódico que se distribuirá a más de mil contactos, también entidades vinculadas al turismo y a la peregrinación.

No obstante, el "principio inspirador" que guía las actuaciones, que se realizan en fases sucesivas de modo que "siempre se podrá visitar una buena parte" del templo, es que las puertas de la basílica permanezcan abiertas. Así lo enfatizó en un acto que sirvió para presentar el balance de las obras realizadas hasta ahora en la seo y finalizadas (Torre del Reloj, fachadas de A Quintana, Azabachería y Obradoiro y cubiertas del Pórtico de la Gloria), las que están en ejecución (cimborrio, fachada del Obradoiro con terraza y cripta, zócalos de la Capilla Mayor y cubiertas de la cabecera) y las que vendrán y en el que enfatizó que pese a que llegado cierto punto, que no concretó, será "imposible mantener las visitas a las cubiertas", el acceso al camarín del Apóstol y a la cripta, "salvo que puntualmente lo requieran circunstancias de la obra", permanecerá abierto todos los días en el horario habitual.

Cuando la fachada del Obradoiro se libere al fin de sus andamios, lo que previsiblemente, indicó, ocurrirá con la llegada de la primavera del próximo año, estos se desplazarán al interior. Además de los fieles habituales, la restricción del culto en horario de mañana la notarán los romeros, que verán cómo la Misa del Peregrino de las 12.00 horas se celebra en la iglesia de San Francisco cuando la liturgia sea incompatible con el ruido de las obras. Aun así, la eucaristía vespertina para los caminantes en principio se mantendrá, así como la de los fines de semana, explicó. Con el botafumeiro ocurrirá algo similar: una vez puesto el primer andamio en el transepto, se tomará un descanso, pero volverá a volar "cuando se quite el último".

Descubrimientos

Mientras algunas puertas se cierran, otras se abren. Las obras en la catedral no solo permiten rejuvenecerla para "recuperar", como explica Lorenzo parafraseando el Códice Calixtino, su "esplendorosa belleza" y que sus 800 años de existencia no le pasen factura, sino también descubrimientos, como dos esculturas, del Mestre Mateo y del Maestro de los Paños Mojados, y más tiempo para visitas culturales y a nuevos espacios, como la Torre norte y la terraza mirador.

Atendiendo a lo invertido (9,2 millones) y lo que queda por disponer (en torno a 17 millones, 15 de ellos del convenio entre el Ministerio de Hacienda, la Consellería de Cultura y la Fundación Catedral), lo grueso está por llegar, aunque Lorenzo consideró que no cree que vayan a ver "algo parecido" a las "muchas" dificultades que se toparon en el cimborrio.

Alguna de las tareas que quedan son de gran "complejidad técnica", indicó el conselleiro, que aludió a la catedral como un "icono de Galicia" y a la restauración como un trabajo de una envergadura inusitada. Según Lorenzo, en 2018 (se calcula que en marzo) se empezará con los paramentos verticales, lo que obligará, indicó, a retirar los encintados de los sillares y las bóvedas restaurarlas completamente. Ese trabajo se prolongará, avisó, "hasta bien entrado" 2019. Ese año estaría previsto abordar el baldaquino, el altar mayor, rejas y pinturas, mientras que en el cronograma de 2018 están las cubiertas de la nave principal, crucero y alas norte y oriental del claustro, capilla del Cristo de Burgos, Torre del Tesoro, fachada al patio de Xelmírez y paramentos interiores y bóvedas.