El impacto de las nuevas rebajas fiscales que la Xunta aplicará el próximo año será de cinco millones de euros, casi seis veces menos que los puestos en marcha este ejercicio y nueve menos que los de 2016.

Así consta en las cuentas autonómicas para 2018, año en que los beneficios impositivos para la población sumarán 396 millones en total. En esa bolsa se incluyen los anunciados durante los últimos ejercicios y se añaden nuevas rebajas en tres aspectos. Se aplicará un descuento del 15% en el IRPF a quienes inviertan en rehabilitación en cascos históricos con un máximo de 9.000 euros y el 20% a quienes lo hagan en empresas agrarias, con un tope de 20.000. También se aplicarán deducciones en el impuesto de Patrimonio en esos casos -más en el de creación de nuevas empresas, teniendo un máximo de 4.000 euros- y quedarán exentos del de Actos Xurídicos Documentados quienes adquieran suelo industrial público.

76 millones desde 2015

Según las cifras ofrecidas ayer por la Xunta, el valor de las rebajas fiscales aplicadas este ejercicio fue de 27 millones hasta sumar 391; mientras que el año pasado alcanzaron los 44 para un importe total de 364. En 2015, los beneficios impositivos llegaron a los 320 millones.