La distribución del gasto de la Xunta por provincias trata de favorecer a Ourense y Lugo para reequilibrar el territorio y reducir la brecha existente entre la Galicia Atlántica y la del interior. Por ello, el gasto por habitante en estas dos provincias crece más que en Pontevedra y A Coruña, aunque la inversión total siga sumando más en las de la costa atlántica que en las del interior.

La Xunta invertirá en 2018 un 9,8% más por habitante en Ourense, un 6,7% más en la de Lugo, un 6,1% en Pontevedra y, finalmente, un 4,5% en A Coruña, según los datos que presentó ayer el conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, que desgranó las líneas generales de gasto. Si la inversión de la Xunta para el próximo año se repartiera entre los habitantes de Ourense, tocarían a 3.648 euros por cabeza. Un poco más recibirían en la provincia de Lugo, con 3.760 euros, mientras que en Pontevedra ya no se sobrepasan los tres mil euros per cápita. Serían en concreto 2.894 euros por cada pontevedrés. La provincia de A Coruña, además de ser la que menos crecerá en 2018, será también la que menos recibe por habitante, con 2.568 euros de inversión.

Las cantidades totales que la Xunta destina a cada provincia, sin embargo, dejan claro que el mayor desembolso está en el Eje Atlántico. En la provincia de A Coruña se concentra el 35% del gasto no financiero de la Xunta. Serán en total 2.883 millones de euros, lo que representa un crecimiento del 4,1% respecto a este ejercicio. La segunda provincia por gasto total es Pontevedra. Los 2.733 millones que recibirá suponen una mejora del 5,8% si se comparan con los de este año y representan un 34% del gasto territorializado. Las inversiones en Lugo y Ourense bajan bastante de los 2.000 millones a los que están acostumbradas las provincias atlánticas. La que más recibe es Lugo, con 1.265 millones, que mejora en un 5,9% la cantidad que le fue destinada este año. Por último, a la provincia de Ourense se destinarán 1.148 millones. Es la menor cantidad, pero el mayo crecimiento, del 7,5%

Las cuentas de la Xunta por provincia recogen desde el pasado año todo el gasto y no solo el de inversiones reales o transferencias de capital, como hacía anteriormente. Así, en este gasto se suman también los sueldos del personal o bienes corrientes y servicios. Antes del cambio, Pontevedra era la provincia con menos inversión territorial. En el 2016 recibió 460 euros per cápita frente a los 725 de Lugo, los 688 de Ourense y los 502 de A Coruña.

El gasto territorializado representa el 87% del gasto no financiero, del Gobierno gallego que el próximo año llegará hasta los 9.487 millones de euros.