Galicia se echa a la calle para mostrar su indignación por el asedio de las llamas sufrido en las últimas horas en toda la comunidad y con especial violencia en el sur de Pontevedra, donde se registraron las cuatro víctimas mortales. Miles de ciudadanos se concentraron en el centro de las siete grandes ciudades y de docenas de villas y pueblos para mostrar su repulsa contra los incendiarios y hacer oír sus consignas. "Lumes, Nunca Máis" era el lema central de las convocatorias simultáneas lanzadas el domingo por la noche por el Comité en Defensa do Monte Galego y secundadas por todos los grupos de la oposición a nivel autonómico, sindicatos y colectivos sociales. La masiva respuesta lograda en "casa" se propagó a nivel nacional e internacional, con cientos de personas exigiendo responsabilidades por lo ocurrido en Galicia y en Asturias en la Puerta del Sol de Madrid, en la plaza frente al Ayuntamiento de Barcelona o en la Grande Place de Bruxelas. "Por un servicio público de extinción público y de calidad", podía leerse en las pancartas desplegadas.

La cita era a las 20.00 de la tarde. En Vigo los organizadores cifran en tres mil las personas reunidas frente al Museo MARCO para luego marchar por Colón hacia la Xunta, donde se escucharon gritos de "Feijóo y Rajoy dimisión". Al igual que en Pontevedra, en la urbe olívica se leían pancartas y escuchaban peticiones para sacar "Ence fóra da nosa Ría" y protestas por "los recortes del PP". Hasta la ciudad se trasladó la líder del BNG, Ana Pontón, "indignada" por la pérdida de los montes gallegos. Impresionantes también las imágenes de miles de lucenses rodeando la Muralla de Lugo exigiendo cambios en la política forestal de la Xunta y la masa de ciudadanos reunida en el Obelisco en A Coruña preguntando a las administraciones "¿quién provoca los incendios?" y pancartas de "Lumes-Feixó. Nunca Máis". En Ourense unos 4.000 vecinos, también según la oposición, se movilizaron contra los incendiarios y para reclamar una nueva legislación forestal.

La capital de Galicia acogió la movilización más multitudinaria con miles de personas en la Praza da Quintana recuperando el grito y las pancartas de "Nunca Máis", exigiendo la presencia de especies autóctonas en los montes gallegos y más esfuerzos en políticas de prevención. Secundaron la concentración el alcalde de Santiago, Martiño Noriega, el líder de En Marea, Luís Villares, el secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, y los nacionalistas Rubén Cela y Goretti Sanmartín. De nuevo pancartas contra la Xunta y contra Ence. Vilagarcía, Xinzo, Redondela, Betanzos, A Guarda o Lalín también se sumaron a las movilizaciones contra la ola de fuegos intencionados.