Telmo, Sonia y la pequeña Sara son una de las 25 familias que tuvieron que pasar la noche en el hotel Bahía de Vigo tras ser desalojados de su vivienda por las llamas. Son de Fragoselo y reconocen haberlo "perdido todo" tras el incendio. "Espantoso, fue espantoso. Nos quedamos hasta el final para intentar salvar a los animales, las vacas, gallinas...todo, lo perdimos todo", lamenta Telmo entre lágrimas.

Construyeron su casa de tres plantas con sus propias manos y con mucho trabajo y lucha sacaron adelante su granja y su proyecto de vida, un futuro ahora truncado por el fuego. "Tenemos el Risga pero con eso no hacemos nada, tenemos una niña menor de edad", explicaba Sonia Llopis, que todavía podía sentir la angustia vivida en la tarde noche de ayer en Fragoselo.

"Parecía que el fuego estaba lejos y de repente lo teníamos encima. Lo tenía cerca de las piernas y rodeando nuestra casa, espantoso", rememoraba esta viguesa, que seguirá al menos una noche más alojada en el hotel