No ha caído apenas agua en Galicia desde el mes pasado ni se la espera para lo que queda de semana. Y lo que ha llovido este otoño no ha bastado para aliviar el déficit hídrico que arrastra la comunidad desde hace ya cinco estaciones. La predicción para la última quincena del mes todavía es una incógnita: todo dependerá de la evolución del anticiclón que ahora está en el norte de la península y que se irá trasladando hacia Europa oriental, según avanzan desde MeteoGalicia.
Esta falta de precipitaciones llevó a declarar la alerta por sequía la semana en seis cuencas de la comunidad y ha obligado a las administraciones locales a ordenar restricciones para garantizar el sumistro en sus localidades. En la actualidad, la mitad de las presas de abastecimiento de la demarcación Galicia-Costa, gestionada por la Xunta, presentan unas reservas por debajo del 50%.
En el conjunto de Galicia, los embalses arrancaron esta semana con unos niveles medios del 55,8%, el valor más bajo desde otoño de 2011 -entonces las reservas no alcanzaban el 54%- y supone casi 12 puntos menos que hace solo un año (67,52%).
De las nueve presas de abastecimiento de la cuenta Galicia-Costa, cuatro están bajo mínimos: Cecebre, Zamáns, Pontillón de Castro y Vilagarcía. Es esta última la que presenta el mayor déficit de la comunidad, con poco más de un 12% de ocupación. Las reservas también escasean en los pantanos que abastecen las ciudades de A Coruña y Vigo, con unos niveles del 49,7% y el 48,65%, respectivamente, según el boletín hidrológico del lunes. Y con apenas el 40% se encuentra el pantano que suministra agua a los vecinos de Baiona. En el extremo opuesto, el embalse de Pontillón de Castro, que abastece a la ciudad de Pontevedra, está al 90%.
De las siete urbes gallegas, Vigo y Ourense acordaron aplicar restricciones en el consumo de agua municipal para evitar que los efectos de la sequía pongan en riesgo el suministro a las viviendas. A Coruña descarta aplicar restricciones de agua a corto plazo.
"Continuará el tiempo seco y soleado, salvo con algunas nubes por la costa de A Corñua", avanza el meteorólgo del servicio autonómico Alberto Romero. "Resulta de ciencia ficción hacer una previsión certera a partir de la próxima semana. Galicia no es Moscú ni África, donde (la previsión meteorológica) es más clara", explica Romero. Que en la comunidad gallega llueva o no en la última quincena de octubre dependerá de la evolución del anticiclón que ahora está en el norte de la península ibérica. "La probabilidad de lluvia aumenta a medida que el anticiclón se tralada a Europa oriental", detalla.
La Fegamp toma medidas
La Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) ha decidido impulsar un protocolo a seguir ante nuevos episodios de sequía en los próximos años, según explica su vicepresidente y alcalde de Cervo, Alfonso Villares. "Son cada vez más frecuentes en Galicia y debemos anticiparnos para garantizar el suministro a los vecinos",razona.
El regidor señala que hay quetomarse en serio el problema de la falta de agua. A su juicio, la comunidad, pese a identificarse por ser verde, también debe ser consciente de que en un futuro la situación puede agravarse. "El agua es un bien preciado, del que parace que nuna sentimos su falta. Pero por sentido común y responsabilidad, se actuará", sentencia.
Villares representará la tarde de hoy a los municipios en el comité permanente creado por la Xunta para tomar medidas en las zonas en alerta por la sequía que arrastra la comunidad.
