Una de las garantías que la Consellería de Infraestruturas ofrece a los padres y que busca tranquilizarlos ante la entrada en vigor del transporte escolar compartido es la figura del acompañante. Si bien hasta ahora era solo necesario en aquellas líneas empleadas por alumnos de educación infantil y primaria (o en las combinadas, que movían también a estos colectivos), a partir del lunes su presencia se extenderá a todas las líneas en las que los escolares combinarán los viajes con el de otros viajeros, el denominado transporte compartido.

En total son 513 líneas escolares, en torno a un diez por ciento del total existente en la comunidad (casi 5.300), las que estarán habilitadas para que los estudiantes compartan espacio con otros viajeros, que, como defienden desde la Xunta, serán en general vecinos y conocidos de su entorno. De ellas, la mayoría se localizan en la provincia de Ourense, donde convivirán ambos colectivos en 281. Aunque el número de acompañantes es inferior al del líneas, desde la Xunta explican que un mismo acompañante puede asistir a varias.

En el caso de Pontevedra, son 105 líneas las que estrenarán esta primera fase de transporte compartido de la Xunta, que se ampliará en el futuro. En A Coruña, en cambio, solo serán 46 las que comiencen a operar el día 11, día también en el que comienza el curso para las etapas de enseñanza obligatorias. En Lugo ascienden al doble, dado que serán en total 81.

La Consellería de Infraestruturas cifra en alrededor de diez mil alumnos los usuarios de transporte escolar que verán cómo sus rutas se utilizan también para el transporte de otros viajeros. De ellos, en torno a 7.500 estudian algún curso de la enseñanza obligatoria, mientras el resto están matriculados en Formación Profesional o Bachillerato.

Los buses que permitan una utilización compartida del transporte llevarán un indicativo en fondo azul que permitirá su identificación. Sobre él, dos figuras, de color blanco, mostrarán las siluetas de un niño con mochila y de un mayor.

Distintivo que llevarán los buses de transporte escolar que admiten viajeros.

Experiencias previas

Aunque es previsible que al inicio del curso se produzcan incidencias, como siempre ha ocurrido, el modelo de transporte compartido ya cuenta con precedentes en Galicia, como la iniciativa, instaurada por el bipartito, de "Tes máis bus". Además, el dispositivo contará con la colaboración de la Guardia Civil para inspecciones.

Los acompañantes y los conductores tendrán una instrucción precisa sobre cómo proceder en cada situación, con capacidad para impedir el acceso al autobús de personas que puedan representar un peligro para los menores y entre otras consignas se anima a agrupar a los escolares para facilitar su supervisión.

La Xunta asegura que con este servicio los vecinos del rural se verán beneficiados de "todas las garantías" que ofrece el transporte escolar, a través de autobuses más nuevos, cinturón de seguridad, mayor intensidad de inspecciones y una reducción significativa en las tarifas, que para casos de corto recorrido tienen un coste único de 1,40 euros.

Ethel Vázquez destacó en varias ocasiones que este sistema funciona con éxito en otras comunidades y se prevé que con este el transporte esté mejor adaptado a las necesidades reales de la gente, sobre todo de los vecinos del rural de Galicia.