En plena temporada alta, apenas hay alumnos en las autoescuelas. El conflicto entre los examinadores y Tráfico, que se resiste a cumplir el compromiso de subida salarial anunciado para 2015, se enquista. Salvo que el Ministerio del Interior dé el visto bueno a un plus de al menos 200 euros al mes, la huelga se convertirá indefinida a partir del 4 de septiembre, a la vuelta de vacaciones de los funcionarios de Tráfico. Ante las reclamaciones de las autoescuelas que urgen la privatización del servicio, los examinadores responsabilizan al Estado de los daños ocasionados por este paro a los centros de formación y a los aspirantes al carné de conducir, que solo en Galicia han quedado sin examinar casi 6.000 alumnos por las protestas de junio y julio. "La DGT ha dejado de recaudar desde que se inició este conflicto unos 12 millones de euros en tasas, tres veces más de lo que le costaría arreglar este problema", reflexiona la delegada en Galicia de la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra), Vanesa Fernández.

Ante la demanda en la Audiencia Nacional que prepara la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) con el objetivo de anular la huelga por "ilegal y abusiva", Fernández defiende los paros convocados como "un derecho fundamental". "Lo abusivo e ilegal es el incumplimiento del acuerdo pactado entre la Administración y los examinadores en el año 2015", argumenta. Por esta "discriminación salarial" que se remonta a 2008 y que la DGT -recuerdan los examinadores- se comprometió a solucionar ya hace dos años y la situación de "desamparo" del colectivo hasta "límites insufribles", la delegada de Asextra en Galicia reclama la "dimisión inmediata" del director de Tráfico, Gregorio Serrano, a quien acusa de "incompetencia e incapacidad" a la hora de "gestionar el conflicto laboral".

Aunque la huelga indefinida ya está convocada para el 4 de septiembre, los examinadores defienden que se ha anunciado con "margen suficiente" para que la Administración "reaccione" e "intente llegar a un acuerdo" que ponga fin al conflicto [...] pero todo apunta a que habrá que ir a la huelga sí o sí", sostienen.