Al conselleiro de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria, Román Rodríguez, "no le gusta" que la Fundación Francisco Franco gestione las visitas al Pazo de Meirás. Es más, le "gustaría que fuese otra" asociación la que se encargase de organizar la entrada al pazo, donde solía veranear el dictador en Sada (A Coruña) y que como Bien de Interés Cultural (BIC) debe ser abierto al público. La familia del dictador decidió encargar a esta fundación la gestión de las visitas, y desde entonces se ha despertado una gran polémica, pues los portavoces de esta organización han asegurado que aprovecharán la oportunidad para loar "la grandeza de Franco".

El titular de Educación en Cultura aseguró ayer que la Xunta "no tiene competencias" para decidir si las declaraciones y los actos de la organización incumplen la legalidad. Es cuestión de la Justicia, añadió y aludió a que la Fiscalía a la vista de las polémicas declaraciones del portavoz de la Fundación, Jaime Alonso, podía tomar la iniciativa y abrir una investigación. Alonso negó los fusilamientos durante la dictadura y atacó a las víctimas del franquismo.

El viernes, en Vigo, el titular de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, pedía Alonso "alguna rectificación" y rechazaba que hiciese "apología que confronta con la legislación cuando se va a enseñar" el Pazo de Meirás.

Román Rodríguez, a preguntas de los periodistas, afirmó que la Administración autonómica "no descarta tomar medidas" si la fundación que gestiona las visitas al complejo de Sada (A Coruña) comete acciones que vayan contra la ley, pero remarcó que es la Justicia la que se debe ocupar de su cumplimiento.

"Obviamente, no se puede consentir ningún tipo de comportamiento que vaya en contra de la ley o que practique cualquier tipo de apología del fascismo o del terrorismo", declaró el titular de Educación e Cultura, quien añadía: "Afortunadamente, todos tienen derechos y obligaciones".

Román Rodríguez explicó que desde la Xunta "hicieron todo lo que tenía que hacer en su momento" con respecto a la declaración del Pazo como BIC, y aseveró que la Fundación Franco "nunca tuvo ni tiene" la colaboración de la Xunta.

Ya el jueves Feijóo recordaba que la Xunta tramitó una sanción a los dueños del Pazo de Meirás por incumplir la obligación de abrir al público el inmueble declarado Bien de Interés Cultural. Afirmó que fue su Gobierno el que exigió a la familia Franco que debía permitir las visitas "después de cuatro años de bipartito en los que no abría al público".

Feijóo desveló además que la Fundación Franco realizó diversos ofrecimientos a la Xunta para que cofinanciase la apertura al público de Meirás, desde cederle la gestión a la administración gallega a cambio de pagar su mantenimiento a conveniar un programa conjunto de actividades para las visitas.

"Lo único que hicimos fue decirle a la Fundación Franco que no a que la Xunta colaborase en la apertura del Pazo, que no a que la Xunta financiase su mantenimiento y no a actividades con la Fundación Franco", recalcó Feijóo.